BOGOTÁ.- El gobierno deColombia, presidido por el izquierdista Gustavo petro, y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) retomaron en la capital de Venezuela las negociaciones de paz, suspendidas en 2019 por el entonces presidente, Iván Duque.
El sábado confirmaron que el primer encuentro se celebrará «en horas de la tarde» de este 21 de noviembre en Caracas.
«Las partes somos conscientes del profundo anhelo del pueblo colombiano, de la sociedad y la nación de avanzar en un proceso de paz y de construcción plena de la democracia», reseñó en un comunicado divulgado por la oficina del alto comisionado para la paz, Danilo Rueda.
El pasado 4 de octubre delegados del gobierno de Gustavo Petro y el ELN acordaron el restablecimiento del proceso de diálogo tras un encuentro en Caracas, en una decisión que busca retomar los acuerdos logrados en marzo de 2016.
Los encuentros serán en «sedes rotativas» entre los países garantes del proceso: Venezuela, Cuba y Noruega, dijo en esa oportunidad Antonio García, comandante del ELN.
Petro, antiguo guerrillero, reactivó contactos con el ELN tras asumir el poder el 7 de agosto, con la mira puesta en retomar las negociaciones, interrumpidas en 2019 por el gobierno de Iván Duque después de un ataque contra una escuela policial que dejó 22 muertos, además del agresor.
Los delegados del ELN fueron acogidos durante cuatro años en Cuba.
«Paz total»
El ELN es la última guerrilla reconocida en Colombia. Fundada en 1964 por sindicalistas y estudiantes simpatizantes de Ernesto «Che» Guevara y la dictadura cubana, la organización ha sostenido negociaciones frustradas con los últimos cinco presidentes colombianos.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) firmaron un acuerdo de paz en 2016 y se convirtieron en un partido político.
Después de la suspensión de los diálogos, el ELN aumentó su pie de fuerza de 1.800 a 2.500 miembros, según estimaciones oficiales, con la infraestructura energética y las transnacionales en Colombia como principales «objetivos militares».
Aunque García encabeza el órgano directivo conocido como Comando Central, la organización tiene una estructura federada con vocería propia en cada frente, lo que según expertos dificulta las negociaciones.
Con presencia en la frontera con Venezuela, el ELN tiene menor capacidad de fuego que la que tuvieron las disueltas FARC, pero su base social, compuesta por milicianos, es más amplia y diversa, según investigadores.
La dictadura de Nicolás Maduro ha expresado «su más firme compromiso con el proceso de paz total en Colombia».
La administración de Petro, por su parte, ha prometido avanzar hacia un proceso de «paz total» en Colombia.