Hace apenas dos días Nicolás Petro, hijo del presidente colombiano Gustavo Petro, anunciaba que había llegado a un acuerdo con la Fiscalía bajo el cual se iba a referir a hechos “que ayudarán a la Justicia”. Este jueves finalmente concretó esas palabras al confesar que “sí recibió altas sumas de dinero” del exnarcotraficante Samuel Santander Lopesierra, conocido como “El Hombre Marlboro”, y de Óscar Camacho, hijo del polémico contratista Alfonso “El Turco” Hilsaca.
Según el informe de la Fiscalía, el hijo de Gustavo Petro entregó durante el interrogatorio “información relevante” sobre la “financiación de la pasada campaña presidencial del actual mandatario y de los dineros que ingresaron a dicha campaña los cuales al parecer habrían superado los topes mínimos permitidos por la ley. Una parte de esos dineros no habían sido reportados ante las respectivas autoridades”.
La confesión cae como un balde de agua fría sobre la Casa de Nariño a pesar de que el presidente colombiano quiso desligarse del escándalo. Apenas detuvieron a su hijo, quiso mostrarse a favor de las investigaciones. Pero ese gesto no fue suficiente para aplacar las críticas.
Nicolás Petro entregará pruebas
Day Vásquez, exesposa de Nicolás Petro, había adelantado lo que ahora confesó su expareja. Ante la Fiscalía aseguró que parte del dinero que recibieron sí ingresó a la campaña de Pacto Histórico. Así, comienza una nueva crisis para el gobierno de Gustavo Petro.
Nicolás Petro reconoció que una parte del dinero “fue invertido en la campaña presidencial del año 2022″ y que “precisará sobre el posible aporte de altas sumas de dinero de empresarios a la campaña presidencial sin que una parte de estos se hubiera reportado. Lo que le permitirá a la Fiscalía abrir otras líneas investigativas. De haber un fuero en las personas vinculadas se compulsarán las respectivas copias”, añadió el informe.
Para comprobar todo lo dicho a la Fiscalía, el acusado por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito se comprometió a entregar “documentación y audios que le den soportes a lo dicho”. La moneda de cambio para tal colaboración sería la detención domiciliaria mientras que para Day Vásquez no habría privativa de la libertad.
Desde la Presidencia no han hecho declaraciones ante este nuevo escándalo que envuelve la ya débil gestión del mandatario izquierdista.