Santiago, la capital de Chile, está en una situación «paupérrima» como consecuencia de la «incapacidad administrativa» de la alcaldesa comunista Irací Hassler. Así lo plantea la resolución aprobada por la Cámara de Diputados que alerta sobre la gestión que tiene en un «estado crítico» a la ciudad.
Con 74 votos a favor, 44 en contra y 16 abstenciones, el parlamento chileno acogió una iniciativa presentada por los diputados de la bancada de Renovación Nacional (RN), María Luisa Cordero, Sofía Cid, Catalina del Real, Andrés Longton, Hugo Rey y Juan Carlos Beltrán, en la que cuestionan «la deficiente provisión de servicios educativos» y el «crítico estado de inseguridad e insalubridad» del municipio que, según sostienen, requiere la intervención del presidente Gabriel Boric.
El documento filtrado por La Tercera indica que entre los argumentos evaluados para elevar la petición al jefe de Estado se destaca que «es innegable cómo durante los últimos meses el estado de la comuna ha alcanzado niveles inéditos en cuanto a inseguridad, insalubridad provocada por la negligencia en la manutención del aseo y ornato comunal, así como por los efectos del desbordado comercio informal, debiendo sumarse a esto la compleja crisis que viven los establecimientos educacionales cuyo sostenedor es el municipio, muchos de ellos de tipo ‘emblemáticos’ como el Instituto Nacional, el Internado Nacional Diego Barros Arana, el Liceo de Aplicación o el Liceo 1».
Sin un abordaje óptimo
Las críticas contra la gestión de Hassler en Santiago, que comenzó en julio del año pasado y culmina en 2024, sobran en la moción donde se considera «el paupérrimo estado de la comuna que no ha sido abordado como es debido por la actual administración».
Este fatídico y vergonzoso balance lo sostienen alegando que las disposiciones de la mandataria local profundizan la crisis y «reman contra corriente», impidiendo soluciones efectivas para los problemas.
Irací Hassler tiene poco para rebatir cuando desmanteló la unidad de fiscalización y vigilancia de la comuna y despidió a los funcionarios adscritos, propiciando demandas contra la institución bajo su mando.
Un desafío para Boric
«Es necesario que el Gobierno preste una colaboración excepcional ante la incapacidad en su actuar», exige el hemiciclo. De lo contrario, el panorama empeorará.
Ya Santiago va rumbo a un precipicio. En redes sociales abundan los videos con registros de los asaltos. Además, los homicidios aumentaron 145 % este año, al registrarse 49 casos entre el 1 de enero y el 27 noviembre, un número que duplica los 20 casos reportados en el mismo periodo de 2021, mientras que los robos con violencia crecieron 95 % y 105 % el robo de vehículos. La situación es grave. Los robos con violencia tuvieron un incremento de 5056 a 9872 en la comuna capital. Asimismo, los asaltos para la sustracción de vehículos crecieron de 182 a 373.
¿Qué hará Boric? Desde La Moneda el único pronunciamiento al respecto ha salido de la ministra de la Secretaría General de Gobierno (SEGEGOB), Camila Vallejo, pero fue para respaldar a Hassler. Ambas militan en el mismo partido. Era previsible, pero en las calles se impone otra tendencia: la alcaldesa tiene 64 % de desaprobación, según la última encuesta del Centro de Análisis de Datos de Estudios de Mercado (Cadem), donde los comunistas -como ella- lideran la lista de los peor evaluados.
En este momento, «caminar por el centro de Santiago es lo más parecido a una suerte de tour por el far west (lejano oeste)», asegura la Cámara Nacional de Comercio y Turismo (CNC). No exageran. Las estadísticas le dan la razón.