El dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, pidió el martes la liberación del expresidente peruano Pedro Castillo, destituido del poder a finales del año pasado y detenido tras decidir la disolución del Congreso y la instauración de un Gobierno con competencias especiales.
“Allí (en Perú) han sembrado el terror, la muerte, simplemente porque el pueblo decidió elegir a un presidente de origen campesino, un maestro de origen campesino, que anda, no gorra, un sombrerito, un hombre humilde, lo eligieron entonces, empezaron en el Congreso a buscar como derrocarlos”, señaló Ortega en un acto público este martes en la capital nicaragüense, Managua, mientras recibía una donación de autobuses rusos.
Según Ortega el motivo clave que explica la destitución y arresto de Castillo es el “odio de clases” que ciertos sectores de la sociedad peruana sienten por el ahora expresidente, quien se desempeñaba como maestro en entornos rurales.
“Simplemente ahí es el odio de clases, el odio de clases, no pueden ver a un campesino, a un trabajador, a un maestro humilde ocupando la presidencia, para ellos eso es inaceptable, y le empezaron a hacer la guerra, la guerra y la guerra, hasta que le dieron golpe de Estado”.
Del mismo modo, el tirano nicaragüense respaldó las revueltas que se producen actualmente en Perú y que se han saldado con cerca de 60 muertes, calificándolas como una muestra de que “el pueblo se ha levantado” contra el Gobierno de Dina Boluarte.