El régimen de Daniel Ortega en Nicaragua ha sido señalado el jueves por la oenegé Monitoreo Azul y Blanco de emplear la modalidad de «represión migratoria» contra sus disidentes y críticos, especialmente luego de las protestas ocurridas en 2018 contra el Ejecutivo nicaragüense.
De acuerdo a Azul y Blanco Ortega ha colocado a 521 personas en la posición de «víctimas» de este mecanismo que consiste en desterrar o bien impedir la salida del país de quienes se opongan a la dictadura sandinista.
«A partir de 2021 se instaura la represión migratoria como uno de los patrones represivos más frecuentes, en especial con la negación de salida del país a líderes políticos y sociales, así como familiares de personas presas políticas», afirma la organización.
De las 521 víctimas al menos 376 habrían sido objeto de destierro, un grupo que además incluye a 260 opositores que llegaron a ser detenidos y posteriormente fueron echadas del país centroamericano.
«Esta práctica de represión migratoria se mantiene durante los primeros meses de 2024 y cabe señalar que estas cifras presentan un subregistro dado que el clima de represión obstaculiza la denuncia de las víctimas respecto a estas prácticas» destaca también la oenegé.