Recibiendo fajos de dinero en efectivo están captados dos hermanos del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Martín y Pío protagonizan las escenas en un par de videos donde ambos al parecer colectan fondos en nombre del “mandamás”, según dos videos divulgados por Latinus.
El más reciente es una grabación en la casa de David León, antiguo funcionario de la presente Administración federal, con una cámara oculta, donde se muestra el intercambio con Martín de 150.000 pesos mexicanos (unos 7500 dólares actuales) en un comedor para presuntamente financiar la campaña presidencial de AMLO.
León comentó al respecto que los videos datan de 2015, cuando fungía como operador político del Gobierno de Chiapas, encabezado en ese momento por Manuel Velasco, y que el dinero corresponde a un préstamo personal con sus ahorros.
El detalles es que también aparece sentado en otro clip en un restaurante en el sur de México donde desliza tranquilamente una bolsa de papel llena de dinero en efectivo a Pío López Obrador, el hermano menor del presidente, acusado de recibir un total de 1,4 millones de pesos (equivalente a USD 94000 en ese momento) en dos ocasiones distintas en 2015.
Delito electoral
Los audiovisuales serían la evidencia del financiamiento para la campaña presidencial del partido Morena, lo que califican como un presunto modus operandi dentro del clan Obrador.
“Nada de este dinero en efectivo fue reportado por Morena al Instituto Nacional Electoral. Esto ya parece un modus operandi, un negocio familiar, y como hay varios metidos, ya califica casi como delincuencia organizada electoral”, señala el periodista Carlos Loret de Mola, quien hizo públicos los videos en su cuenta de Twitter.
“Son muchas entregas, mucho dinero y los hermanos dicen que llega a las manos de Andrés Manuel López Obrador, hoy presidente de México. Eso califica como delincuencia calificada electoral, son más de tres metidos en el ajo. Están corrompidos hasta el tuétano”, agregó Loret de Mola.
AMLO ataca y refuta al columnista de El Universal de México. “Loret de Mola debe estar hasta preocupado porque se detuvo al señor Cárdenas Palomino –brazo derecho de Genaro García Luna, quien está preso en Estados Unidos– que aparece en uno de los montajes que hizo Televisa golpeando a un supuesto secuestrador”, dijo.
Al respecto, Loret de Mola respondió que “frente a lo evidente, frente a lo contundente, ya son dos, Pío y Martinazo, que no le haga a la especulación, que no conteste con insultos. Que responda dónde quedó esa lana (dinero), de dónde venía, quién se la mandó y por qué, y a cambio de qué y que deje de elucubrar, que si Cárdenas Palomino”.
Un mal familiar
Felipa Guadalupe Obrador Olán, prima hermana del presidente, también engrosa la lista de familiares de AMLO envueltos en supuestos hechos de corrupción con su empresa, Litoral Laboratorios Industriales, beneficiada con contratos de Pemex por más de 365 millones de pesos (unos 18 millones de dólares).
La compañía ganó el año pasado tres contratos por 133 millones de pesos (USD 6,6 millones) para desarrollar un análisis de aguas, evaluación de ruido y caracterización de hidrocarburos y químicos en instalaciones de Pemex Exploración y Producción.
Y en 2019, la misma empresa ganó, junto a Marinsa de México, un contrato por 231 millones de pesos (USD 11,6 millones) para introducir productos químicos a pozos que están en aguas someras frente a la península de Yucatán, el cual caducará en 2022.
Todas las adjudicaciones las otorgó de forma directas con el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), Aeropuertos y Servicios Auxiliares, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Concepción Falcón Montejo, esposa de Ramiro López Obrador, otro de los hermanos del mandatario mexicano, conforma la lista como participante de un presunto desfalco millonario en Macuspana, Tabasco —municipio de donde es originario López Obrador— que provocó la renuncia de 11 funcionarios del gabinete local, entre ellos el alcalde de la demarcación, Roberto Villalpando Arias.
La operación habría sido por más de 200 millones de pesos (USD 10 millones) entre 2019 y 2020, a partir del desvío de recursos correspondientes al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) y al Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (Fortamun).
Con todo ello, la promesa electoral clave de López Obrador en 2018 de limpiar la corrupción convenció a los mexicanos pero hoy es una decepción que deja al país sin esperanza.
Castigo en la mesa
El entorno político presiona al presidente. El Partido Revolución Democrática (PRD) solicitó al Instituto Nacional Electoral (INE) castigo “ejemplar” a Morena por posibles actos de corrupción ejecutados por Martín López Obrador.
El líder nacional del partido, Jesús Zambrano, argumentó que «el financiamiento privado ilícito debe ser castigado».
A él se unió la bancada del Partido de Acción Nacional (PAN) del Senado que denunció en Twitter a la familia de López Obrador por gozar de impunidad.
“Primero Pío López Obrador, después Felipa Obrador y ahora Martín López Obrador. La familia López Obrador está llena de corruptos que deberían estar sentados frente a un juez, pero gozan de la impunidad que les otorga el presidente”.
Lavándose las manos
«Si hay algún delito de mi hermano, de quien sea, yo no encubro a nadie, es muy claro que comete un delito, sea quien sea, debe ser castigado. Entonces, independiente a lo mediático, lo político, si existen pruebas hay que denunciarlo, todos los ciudadanos tenemos la responsabilidad de proceder y la autoridad competente tiene que resolver si hay un delito o no lo hay», dijo desde el Palacio Nacional, López Obrador.
Palabras. Solo léxico político porque al mismo tiempo acusó que la difusión del video intenta perjudicarlo y forma parte de una “campaña negra” en su contra, pues sostiene que se trata de un asunto personal entre su hermano, Martín Jesús, y David León Romero.
Una defensa implícita en un discurso ambiguo. Típico en el presidente que por un lado se confiesa con la “conciencia tranquila” y por otro revela que no ha hablado ni con su hermano ni con David León.
«A mi hermano Martín no lo veo desde hace cinco años. Yo estoy entregado por completo a la causa que defendemos, enarbolamos y estamos llevando a cabo en beneficio de la gente, a la causa de la transformación yo ya no me pertenezco”, dijo con evidente tono populista.
Pero su familia no es el único problema. El mandatario arrastra desde 2019 un aumento de los actos de corrupción autoinformados, como la solicitud de sobornos por parte de funcionarios públicos que subieron 19 % a 30500 por cada 100.000 personas en comparación con 2017, según una encuesta realizada por la Agencia Nacional de Estadísticas, mientras que hubo 16000 víctimas de corrupción por cada 100.000 habitantes, un aumento de 7,5 %.
Y otros datos apuntan a que 78 % de todos los contratos gubernamentales en México se adjudicaron sin un proceso de licitación pública.
Fuente: PanamPost