La economía de Ecuador se contrajo un 7,8% en el 2020 por efectos de la pandemia del coronavirus, que golpeó con fuerza el consumo de hogares y del gobierno, la inversión y las exportaciones, dijeron este jueves las autoridades económicas del país andino.
La caída del Producto Interno Bruto (PIB) en el 2020 fue menor a la proyectada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) de un 9,5% en medio de la pandemia, pero la tasa negativa registrada es una de las contracciones más fuertes en décadas.
«El año pasado la economía ecuatoriana decreció al 7,8% (…) esto sin duda alguna es una tasa absolutamente mucho más compatible con el esfuerzo que se ha venido desplegando y por lo tanto es mucho más favorable», dijo el ministro de Economía y Finanzas, Mauricio Pozo, a periodistas.
«Hemos podido sortear la crisis gracias al apoyo internacional porque nos ha permitido que la actividad económica se siga moviendo y que no tenga el impacto original que se estimó», agregó.
Para el 2021, las autoridades económicas esperan que la economía tenga una recuperación importante y crezca al menos un 3,1%. Ecuador tiene un acuerdo económico por US$6.500 millones con el FMI y crédito con varios multilaterales.
El banco central del país, de su parte, dijo que el resultado negativo del año pasado se explica por una caída del 11,9% de la inversión, un 7% del gasto de consumo de los hogares y un 2,1% de las exportaciones de bienes y servicios.
Sin embargo, la nación petrolera tuvo ventas al exterior con saldos positivos de productos como camarón, banano, café, cacao y pescado, añadió la entidad en un informe publicado en su página en Internet.
Las importaciones de bienes y servicios fueron menores en 7,9% frente a las registradas en el 2019.
El banco central añadió que el sector petrolero tuvo una contracción de 9,8% por un deterioro en el desempeño en la extracción de petróleo. La producción nacional de crudo de 2020 fue de 175,4 millones de barriles, 9,5% menos que en 2019.
La caída de la producción de petróleo está asociada a los daños que registró el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) en abril. «Desde entonces ha experimentado una lenta recuperación», dijo el informe del banco central.
El sector no petrolero también decreció en 6,6%, con un menor dinamismo en industrias como transporte, alojamiento y servicios de comida, construcción, entre otras.
Fuente: América Economía