MADRID.- «Compatriotas, no desmayen, que no los defraudaré», pidió este martes, 10 de septiembre, el presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, a través de una carta leída por su hija Carolina González, ante un millar de venezolanos que se congregaron en los alrededores del Congreso español en Madrid.
En voz de su hija menor, radicada en España desde hace varios años, el diplomático ratificó el «compromiso inquebrantable» que asumió el pasado 28 de julio, cuando más de siete millones de venezolanos lo eligieron en las urnas electorales para el período presidencial 2025-2031.
Agradeció a los venezolanos que lo eligieron y a quienes no lo pudieron hacer, por «las artimañas» del Consejo Nacional Electoral (CNE) al servicio del régimen de Nicolás Maduro, que impidió la inscripción de nuevos votantes y actualización de datos de los electores, especialmente, los cerca de ocho millones que han huido del país suramericano.
Llamado a la comunidad internacional
El presidente electo venezolano, bajo la protección del gobierno español del socialista de Pedro Sánchez desde la noche del sábado, cuando salió de urgencia de Caracas con destino a Madrid en un avión de las Fuerzas Armadas españolas, hizo un llamado a la comunidad internacional a «redoblar los esfuerzos por la restitución de la democracia y la libertad en Venezuela».
«La voluntad del pueblo expresada el 28 de julio tiene que ser respetada y la haremos respetar», sostuvo el exembajador, de 75 años de edad, poniendo fin a las dudas sobre el papel que desempeñaría en España, tras el tímido comunicado emitido el día anterior.
Con esta carta, además, González Urrutia echó por tierra los rumores de supuestas diferencias con la líder opositora María Corina Machado, quien le levantó la mano ante la inhabilitación política que le impidió participar en las recientes elecciones, promovidos principalmente desde las filas del chavismo.
«María Corina y yo les aseguramos que esta lucha que iniciamos continuará hasta alcanzar los objetivos que nos pusimos, hasta el final. Agradezco al gobierno de España por brindarme apoyo y cobijo a mí y a mi familia en estos días tan difíciles. Compatriotas, no desmayen, que no los defraudaré», concluyó la misiva leída por su hija.
Venezolanos protestan desde Madrid
Cerca de un millar de venezolanos se reunieron frente al Congreso español, donde este martes se debatía una resolución impulsada por el Partido Popular (PP), que insta al gobierno de Sánchez a reconocer a González Urrutia como presidente electo de Venezuela.
«Se nota, se siente, Edmundo presidente», era una de las consignas que centenares de venezolanos, con banderas y gorras del tricolor venezolano, coreaban desde la Plaza de las Cortes de Madrid, donde reivindicaron el triunfo obtenido por la oposición en los pasados comicios, en compañía de líderes emblemáticos como los exalcaldes Leopoldo López y Antonio Ledezma.
Los organizadores del evento, impulsado por Machado la mañana del lunes, respaldaron la proposición no de ley (PNL) presentada por el PP en el Congreso. «España tiene la oportunidad de ponerse de lado del pueblo de Venezuela», afirmaron los promotores del evento, reseñados por la agencia española Europa Press.
El Congreso reconocerá a Edmundo González Urrutia
La iniciativa política tiene la mesa tendida para ser aprobada este miércoles, 11 de septiembre, en el Congreso, con los 137 votos de los diputados del PP, los 35 que agregan sus aliados del Vox, la Unión de Pueblo de Navarro (UPN) y la Coalición Canaria, y los cinco del Partido Nacionalista Vasco (PNV), que anunció su apoyo al proyecto la mañana de este martes.
Aunque no tiene efectos jurídicos, la aprobación de esta propuesta representa un golpe para el gobierno socialista de Sánchez, que ha dejado en claro su intención de desconocer la resolución parlamentaria e insistir al régimen chavista en la publicación de las actas electorales de todas las mesas de votación.
La proposición no de Ley insta al gobierno español no solo a reconocer al opositor como presidente, sino a liderar su reconocimiento ante instituciones europeas e instancias internacionales, con el objetivo de garantizar la toma de posesión de González Urrutia el 10 de enero de 2025.
También exige a la dictadura chavista el «cese inmediato» de la represión, desatada tras las protestas postelectorales, que ha dejado al menos 23 manifestantes muertos por armas de fuego y más de 1.500 detenidos, según ONG.
La resolución llama a respaldar a los representantes elegidos por los venezolanos como «únicos interlocutores legítimos en las negociaciones para la transición democrática» y a apoyar «todas las iniciativas de las fuerzas democráticas, especialmente aquellas dirigidas a mantener viva la movilización en defensa del resultado del 28 de julio».
Además, exhorta a promover ante la UE la reinstauración de las sanciones a los dirigentes del régimen, levantadas antes de las elecciones como un «inútil gesto de buena voluntad».