El gobierno estadounidense de Joe Biden sigue haciendo concesiones al régimen de Nicolás Maduro. A inicios de mayo el Departamento del Tesoro de EE. UU. otorgó una licencia específica a la petrolera francesa Maurel & Prom (M&P) para que continúe operando su empresa mixta con PDVSA hasta el año 2026, y ahora las beneficiadas son la británica BP (BP.L) y la energética estatal de Trinidad y Tobago, NGC, que podrán desarrollar los campos de gas Cocuina-Manakin, gracias a las últimas licencias otorgadas por la Administración demócrata.
Estas decisiones van en sentido contrario a la firmeza contra la dictadura chavista que pretendieron aparentar desde Washington con la reimposición de sanciones al no renovar la Licencia General 44 sobre los hidrocarburos, pero tan solo días después conceder el permiso para hacer negocios con Venezuela a empresas extranjeras de forma individual. Ahora, tanto BP como NGC “pueden planificar un proyecto que involucra un depósito marino con alrededor de un billón de pies cúbicos de reservas de gas que se extiende desde Venezuela hasta Trinidad”, reveló el ministro de Energía del país insular, Stuart Young.
De esta manera se alarga el listado de empresas que continuarán operando con PDVSA, controlada por el chavismo, comenzando por Chevron, la cual tiene el visto bueno para vender petróleo en EE. UU. de sus empresas conjuntas con Venezuela. Eso además le garantiza a la Administración Biden un suministro seguro de crudo en meses cruciales rumbo a las elecciones presidenciales de noviembre, considerando que el precio de la gasolina puede hacerle ganar o perder votos.
Nuevo proyecto gasífero de Maduro
El régimen chavista y el gobierno de Trinidad tienen grandes planes para la explotación de gas con otro proyecto que involucra aguas de ambos países. Se realizará en el campo de gas Loran-Manatee, ubicado en la plataforma continental del Océano Atlántico, cuyo yacimiento cuenta con unos 10 billones de pies cúbicos de gas natural. Una mina de oro para la dictadura de Maduro, urgida por ingresos mientras ve cómo su rival para las elecciones del 28 de julio, el opositor Edmundo González Urrutia, lo triplica en intención de voto, según todas las últimas encuestas.
Este listado de empresas se alarga cuando se menciona que la española Repsol y la isla caribeña de Aruba “también han recibido licencias estadounidenses en los últimos días para hacer negocios con Venezuela”, según ha publicado la agencia Reuters.
Así, los negocios del chavismo en el mercado petrolero y gasífero continúan su rumbo bajo la mirada de Estados Unidos a pesar de que el primero incumplió los Acuerdos de Barbados —donde se comprometía a permitir la participación de todos los candidatos opositores y la observación de la Unión Europea (UE) en los comicios— cuando ratificó la inconstitucional inhabilitación a María Corina Machado, quien está recorriendo Venezuela para promover la postulación de su representante, y en las últimas horas revocó la invitación a la UE para observar las elecciones.