LA HABANA.- Un portavoz del Departamento de Estado informó que altos funcionarios de Estados Unidos y Cuba se reunirán en La Habana, el 14 de noviembre, para llevar a cabo conversaciones trascendentales sobre la ejecución de acuerdos migratorios que datan de 1984.
El objetivo principal de este encuentro es abordar asuntos relacionados con la reunificación de familias y el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en Cuba, de acuerdo con el funcionario.
«La prioridad de Estados Unidos es garantizar una migración segura, ordenada, humana y regular entre Cuba y Estados Unidos», agregó el portavoz, según reseña Martí Noticias.
La última reunión sobre este tema tuvo lugar en Washington en abril de 2023, con David Cloe, Subsecretario Adjunto para el Hemisferio Occidental del Departamento de Seguridad Nacional, liderando la delegación estadounidense y Carlos Fernández de Cossío, Viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, al frente de la delegación cubana.
Durante ese encuentro, los representantes estadounidenses destacaron los logros en la cooperación migratoria y señalaron los desafíos que han obstaculizado el cumplimiento de los objetivos de los acuerdos, según el Departamento de Estado.
En una reunión anterior celebrada en noviembre de 2022, ambos países acordaron reanudar los vuelos de deportación para los migrantes identificados como «inadmisibles» por Washington.
Creciente ola de migrantes cubanos
La ola de migrantes cubanos que cruzan la frontera sur hacia Estados Unidos continúa ganando fuerza. Los datos proporcionados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) indican que en el mes de agosto, más de 12.000 cubanos fueron interceptados en la frontera, casi el doble de la cifra registrada en julio.
En el año fiscal que concluyó el 30 de septiembre, el número de cubanos interceptados en la frontera se elevó a aproximadamente 185.000, de acuerdo con estadísticas de la CBP.
Además, en ese mismo período, los guardacostas estadounidenses reportaron haber interceptado a más de 7.000 balseros cubanos.
Las autoridades estadounidenses han reiterado su posición de que los migrantes detenidos en su intento de ingresar de manera irregular al país serán repatriados y no serán elegibles para el programa de parole humanitario vigente.