WASHINGTON.- Funcionarios de Estados Unidos y del régimen de Cuba se reunirán este martes 16 de abril en Washington, para abordar la implementación de los Acuerdos Migratorios entre ambos países, como parte de los pactos bilaterales que datan desde 1984.
El Departamento de Estado reafirmó, según reseña Martí Noticias, la importancia de garantizar una migración segura, ordenada, humana y regular entre Cuba y Estados Unidos, en línea con su compromiso continuo de fomentar la reunificación familiar y promover el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales en Cuba.
Aunque no se han proporcionado detalles específicos sobre la agenda de las discusiones, se espera que estas conversaciones representen una continuación del compromiso de más de tres décadas en asuntos migratorios entre ambos vecinos.
La última reunión sobre este tema tuvo lugar el pasado 14 de noviembre en La Habana, marcando la segunda sesión de discusiones bilaterales sobre migración en el año 2023.
Esta reunión será la quinta ronda de conversaciones migratorias entre Estados Unidos y Cuba desde que la administración del presidente Joe Biden decidiera reanudarlas en abril de 2022, luego de que su predecesor, Donald Trump, las interrumpiera y endureciera las sanciones contra el régimen cubano.
Cubanos quieren llegar a EEUU
Estas conversaciones ocurren en un momento en que Estados Unidos enfrenta un flujo continuo de cubanos llegando a su frontera sur con México. Solo en febrero pasado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) registró el arribo de 20.815 migrantes procedentes de Cuba, sumando un total de 106.949 en el actual periodo fiscal (FY2024).
Además, CBP informó que más de 81.000 cubanos se han beneficiado del parole humanitario hasta febrero de 2024, tras la ampliación del programa por parte de la administración Biden en enero de 2023 para ciudadanos de Cuba, Haití y Nicaragua. De ellos, 79.000 ya han ingresado a territorio estadounidense.
En el año fiscal 2023, 5.253 cubanos fueron repatriados a la isla, en su mayoría desde Estados Unidos, en medio de una oleada migratoria sin precedentes que ha alcanzado cifras récord en los últimos años.