lunes, noviembre 25, 2024
InicioOpiniónEl centrismo bobo europeo y la preocupación por la “extrema derecha”

El centrismo bobo europeo y la preocupación por la “extrema derecha”

Marcelo Duclos,

La caída de Emmanuel Macron es el símbolo de un fracaso, el de una clase política europea supuestamente progresista, que gobernó de espaldas a la gente ignorando los intereses de la ciudadanía. Sin embargo, el francés no es el único desacreditado de este centrismo políticamente correcto. La realidad es que este es el primero que caerá, pero definitivamente no será el último.

En países como España o Alemania la preocupación por el avance de la mal llamada “extrema derecha” no es un secreto y la burocracia de Bruselas ya reconoce la incertidumbre. Claro que esto no se trata de una cuestión ideológica abstracta. Los políticos nacionales ubicados en el centro, que ya se notan deslucidos, saben que muy pronto los electores de esos países le pasarán la cuenta en los comicios domésticos. El hartazgo ante un PSOE asociado con los comunistas en España es una realidad y qué decir de Alemania, donde el derechista AFD (Alternativa para Alemania) creció exponencialmente.

Nada de esto puede ser sorpresivo cuando la socialdemocracia y el FDP (Freie Demokratische Partei), conocido internacionalmente como el “partido liberal“, gobiernan en coalición con los verdes y mantienen un doble estándar ante la “extrema izquierda”, con la que conviven, mientras que tratan de leprosos a quienes han decidido señalar, equivocadamente, como “extrema derecha”, que no hizo otra cosa más que crecer en la opinión pública.

Para ilustrar el caso alemán no hace falta más que recordar el llamado “escándalo de Turingia” hace cuatro años. El país y toda Europa se horrorizaron porque se había formado una coalición de gobierno con un representante del FDP, que asumió con los votos del AFD. Alemania se escandalizó, ya que se había roto una supuesta barrera de contención histórica a la “extrema derecha”. ¿Qué pasa ahora en Turingia? Gobierna sin cuestionamientos la “extrema izquierda” con el apoyo de socialdemócratas y verdes.

En lugar de rasgarse las vestiduras y llorar sobre la leche derramada, el centrismo europeo debería tomar una actitud absolutamente diferente a la estrategia actual: la de denominar de “extrema derecha” a todo lo que no les gusta, de mirar para otro lado ante la izquierda dura y aceptar un proyecto de Unión Europea que vulnera la soberanía de los países. Nadie puede negar que los años de la UE han sido de paz y crecimiento económico interno, pero lo cierto es que también se ha consolidado una burocracia intervencionista, que crece en pos de sus propios intereses. Para salvar al proyecto europeo de los nacionalismos nostálgicos, se debe retomar el proyecto original de moneda común y libre tránsito. Nada más. Ni siquiera el parlamento europeo tiene sentido alguno.

Ante la hegemonía cultural izquierdista, que afortunadamente ahora se pone en jaque, el arco político se ha corrido hacia el progresismo bobo, lo políticamente correcto y el paternalismo estatal. Nada de esto, como era de esperar, ha dado buenos resultados. Ante los desajustes evidentes, el mercado corrige. Y, aunque la política es poderosa, tarde o temprano en democracia, el mercado también corrige. Sin importar los millones de dólares con los que cuentan los espacios tradicionales. Cuando la ciudadanía se harta, se harta. Argentina es un claro ejemplo de la victoria de un David que se impuso a un Goliat que financió su campaña hasta imprimiendo billetes.

La política europea debe dejar de perseguir fantasmas si le preocupa realmente el proyecto “europeísta” que Macron no puede representar. El centrismo de los países motores del continente y la política de Bruselas tienen una disyuntiva a mediano plazo. Pueden aferrarse a un proyecto fracasado y a lo políticamente correcto, desconectado de la opinión pública o recuperar el sentido común y la agenda que le importa a los europeos. Es lo mejor que pueden hacer, si de verdad les preocupan las ideas nacionalistas y de las denominadas como “extremas derechas”.

Fuente: Panampost

ARTICULOS RELACIONADOS

REDES SOCIALES

585FansMe gusta
1,230SeguidoresSeguir
79SeguidoresSeguir

NOTICIAS POPULARES