La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha confirmado este miércoles que si bien en la próxima ronda de negociaciones con el Gobierno de Colombia se abordará el alto el fuego bilateral, no están dispuestos a que la «presión mediática» marque los tiempos y los temas de una agenda ya «acordada».
El ELN ha explicado que hay un proceso de diálogo en curso, con una «agenda acordada», que será en esa mesa de negociación donde se discutan aquellos temas presentes en ella y que no participarán del «juego» de la «presión mediática».
«Hay unos protocolos y normas pactadas que deben respetarse», ha zanjado el ELN en un comunicado, en el que salen al paso de las críticas por su supuesta falta de interés en negociar con el Gobierno tras los últimos atentados, los cuales, han recalcado, estaban justificados en respuesta a las acciones del Ejército.
Así, ha señalado que antes de final de 2022, tras la primera mesa de negociación en Caracas, enviaron al Gobierno sus «consideraciones» acerca de las ofensivas que el Ejército estaba realizando en sus áreas, pero «desafortunadamente, no hubo respuestas efectivas y siguieron las ofensivas militares».
«Por lógica y por inercia del conflicto nuestras acciones militares deben analizarse al igual que se analizan las operaciones de las fuerzas gubernamentales, es de sentido común», ha reclamado el ELN, que también rechazado la versión de que habría desunión entre los diferentes frentes del grupo en relación a estos diálogos.