El Foro de Sao Paulo anunció en su página electrónica una nueva interferencia en un proceso democrático. La organización avisa que, a partir de este lunes, se ha incorporado oficialmente a la campaña presidencial del candidato Lula de Silva, con una jornada de movilización internacional identificada con la etiqueta #LulaPresidente.
La convocatoria del Foro comienza diciendo: “En octubre de este año, Brasil vivirá elecciones presidenciales y tendrá la oportunidad de derrotar a Bolsonaro y defender nuestra democracia. En ese sentido, hacemos un llamado a todos, todas y todes a participar de esta jornada de movilización para elegir #LulaPresidente”. La referencia a “todes” indica su compromiso con la ideología de género.
La campaña incluye publicaciones a través de las redes sociales como Twitter, Instagram y Facebook, la grabación de videos de un minuto “diciendo por qué quiere ver a Lula como presidente de Brasil” y “acciones, eventos y actos en el extranjero con motivo de la elección del presidente Lula”.
Dado que el Foro de Sao Paulo es una organización internacional, conformada por partidos políticos marxistas de toda Iberoamérica y el Caribe, esta campaña significa una injerencia descarada en los asuntos internos del Brasil; lo que no es de extrañar, porque el FSP y el Grupo de Puebla lo hacen ya constantemente.
El 30 de marzo, en este mismo espacio, publiqué una nota titulada “El Grupo de Puebla alienta el regreso a Brasil del modelo de corrupción de Lula”, en la que denuncié la injerencia en la campaña electoral del Brasil de los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero y Ernesto Samper Pizano, del exjefe de gabinete de Pablo Iglesias, Pablo Gentili, y de la ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, entre otros.
En dicha nota expliqué que la candidatura del expresidente Lula es producto de una conspiración en la que participan no solamente los sectores de izquierda dentro y fuera del Brasil, sino también otros grupos que desean desalojar a Bolsonaro del poder, porque el actual mandatario brasileño ha combatido la corrupción que los alimenta.
Para completar la trilogía de intervenciones, la Internacional Progresista emitió un comunicado en agosto pasado, para blanquear la corrupción de Lula da Silva y de otros miembros del Foro de Sao Paulo, como Manuel Zelaya, Rafael Correa, Fernando Lugo, Evo Morales, Álvaro García Linera, y Cristina Fernández de Kirchner, quienes, según los progresistas, son víctimas del “lawfare”, palabra favorita que sirve para encubrir los delitos que cometen sus aliados.
Lo aquí expuesto viene a ratificar lo que tantas veces se ha denunciado, respecto a que los candidatos de la centro derecha son el resultado de un esfuerzo exclusivamente nacional; mientras que los candidatos del marxismo son los gerentes locales de una estructura internacional que busca apoderarse de las naciones hispanoamericanas.
Una vez más queda demostrada la necesidad de que los sectores democráticos de la Iberosfera se articulen para luchar mancomunadamente en contra del Foro de Sao Paulo, el Grupo de Puebla, la Internacional Progresista y su política injerencista.