Luego de responsabilizar a los 11 meses de gobierno de la expresidente Jeanine Áñez por todos los males posibles en el país, y además alardear de aciertos que no son tales, al régimen de Luis Arce Catacora se le hace cada vez más difícil encarar los desafíos de la profunda crisis que se agrava en varios ámbitos, y acaba de anotar un nuevo fracaso en su amplio repertorio: se ha visto forzado a aplazar el Censo de Población y Vivienda 2022.
Sucede que, debido a la ineptitud demostrada por las autoridades fundamentalmente del ministerio de Planificación y el Instituto Nacional de Estadística (INE), y la incertidumbre generada por lo mismo, se esperaba que fracasaría, o que simplemente fuera postergado o suspendido. Pues dicho y hecho: el régimen de Arce ha decidido postergar el Censo 2022 hasta 2024, aunque sin fecha concreta.
Desde luego, el fracaso no tiene que ver únicamente con la posibilidad de realizarlo o no, sino por todo lo que implica para el país en su conjunto, para las demandas de su población en relación a su realidad actual.