El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene previsto reunirse este jueves con el presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, a quien recientemente concedió asilo político tras negociar con el régimen de Nicolás Maduro a través de la mediación de José Luis Rodríguez Zapatero.
Este encuentro tiene lugar después de que el Congreso de los Diputados le haya reconocido como presidente legítimo y de que el Gobierno y sus aliados hayan votado en contra de esta iniciativa, con excepción de los cinco diputados del PNV, quienes inclinaron la balanza a favor de la moción presentada por el PP.
Mientras tanto, tanto Alberto Núñez Feijoo y Santiago Abascal aún no han logrado concretar un encuentro con el líder opositor venezolano, aunque no por falta de interés. Los equipos de los dirigentes del PP y VOX mantienen contacto constante con el entorno de González Urrutia y de María Corina Machado. Sin embargo, desde el PP sostienen que el motivo de la falta de reunión es claro: «El Gobierno no lo permite«, señalan en declaraciones a Vozpópuli.
Todo apunta a que el Ejecutivo no permite libertad de movimientos a González Urrutia, quien probablemente habría asistido junto a su hija al Congreso este miércoles. «Está claro que el Gobierno busca que no se vea con nadie antes de reunirse con Pedro Sánchez«, afirman en el PP.
En cuanto a VOX, su líder, Santiago Abascal, se ha pronunciado en términos similares a los del PP. Durante una manifestación de apoyo a la causa opositora frente al Congreso, Abascal criticó duramente tanto al Gobierno español como al expresidente Zapatero, a quien calificó como «cómplice principal de la dictadura«. Abascal comparte la visión de que el Gobierno de Sánchez ha cumplido con los deseos del régimen de Nicolás Maduro al forzar el exilio de González Urrutia. A pesar de su interés en reunirse con el líder opositor, desde VOX prefieren actuar con «máxima cautela«, ya que González Urrutia tiene una hija en Venezuela a quien se le impidió salir del país, lo que añade una capa de preocupación por posibles represalias.