«Falta mucho, mucho por hacer. Pero, gracias a Dios y a nuestros héroes, vamos por el camino correcto«, sostuvo el mandatario salvadoreño.
De acuerdo con la Policía Nacional Civil (PNC), en febrero hubo 114 homicidios frente a los 207 del mismo mes de 2019 y, entre el 1 de enero y el 29 de febrero, se han registrado 233 en todo El Salvador, lo que supone el arranque de año más seguro desde la firma del acuerdo de paz.
El ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, lo ha atribuido «al trabajo que día a día realizan los elementos de la PNC y la Fuerza Armada«. La Policía, por su parte, ha ratificado su compromiso con «el combate de la criminalidad, que garantiza el bienestar de todos los salvadoreños«.
Asimismo, el cuerpo de seguridad ha señalado a «los buenos resultados de los planes ejecutados en materia de seguridad por la actual gestión». «Desde el inicio del mandato del presidente Bukele y la implementación del Plan Control Territorial, la baja en los homicidios ha sido sostenida, alcanzando cifras históricas«, informó en un comunicado.
Bukele convirtió la lucha contra las pandillas en una de las prioridades de su Gobierno. A principios de febrero llegó a ocupar el Congreso rodeado de militares y policías armados para forzar a los diputados a liberar los fondos necesarios para financiar su plan contra las maras.
Videovigilancia en San Salvador
En este contexto, el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, anunció la puesta en marcha de un sistema de videovigilancia en las calles de la capital para frenar la inseguridad ciudadana.
El sistema Smart City, por el cual se instalarán cámaras y botones del pánico en la vía pública, se implementará en tres meses a cargo de la empresa mexicana EyeTech por un valor de 84 millones de dólares.
Para hacer frente a este desembolso de dinero, el Ayuntamiento creará una tasa municipal proporcional al poder adquisitivo del contribuyente. «Una casa de clase baja le puede afectar dos centavos y a una casa de clase alta le puede afectar 10 o 12 dólares«, explicó Muyshondt a La Prensa Gráfica.
El edil capitalino ha defendido que «el retorno social y el retorno económico de este proyecto es mucho más a la inversión que se va a ser en el mismo«, argumentando que San Salvador será una ciudad más segura donde vivir y hacer negocios será más fácil.
Fuente: Diario las Américas