MIAMI. – Al candidato del Partido Republicano para las elecciones primarias, Mike Pence no se le ha visto la vehemencia que le caracterizó en la vicepresidencia del gobierno de Donald Trump en casi cuatro meses de campaña, opinan observadores políticos en EEUU.
“(Nicolás Maduro) Suspenda esta farsa de terror y dele al pueblo de Venezuela verdaderas opciones (…) Los venezolanos merecen vivir en democracia“, fueron algunas de las frases que dijo Mike Pence en el Consejo Permanente de la OEA, en 2018, al referirse al régimen del país suramericano. Allí también exclamó, en español y con contundencia, «¡que viva Cuba libre!», y condenó la «represión» en Nicaragua y Venezuela.
También la empleó en el debate con la senadora Kamala Harris, durante la recta final de la campaña electoral de octubre de 2020, en la que acompañó por última vez al presidente Trump como candidato a la reelección.
“China merece ser culpada por el coronavirus, y el presidente Trump no está feliz con eso. Lo ha dejado en claro. China y la Organización Mundial de la Salud no le ha jugado limpio a los estadounidenses […] Afortunadamente, Trump se opuso a que China se siguiera aprovechando de nosotros”, dijo Pence en aquel momento, en referencia a la pandemia del COVID-19 que cobró millones de vidas y paralizó la economía con una repercusión que aún afecta al mundo.
El desafío de las encuestas
Mike Pence, de 64 años y nacido en Indiana, presentó su candidatura en junio para las elecciones de 2024. Como aspirante a la nominación de su partido, asistirá al segundo debate presidencial, con desventaja en niveles de popularidad respecto a algunos de sus contrincantes, lo que le hace cuesta arriba el éxito de sus aspiraciones presidenciales. En total, por el Partido Republicano compiten nueve aspirantes, incluido el expresidente Trump que ha dicho no asistirá a ningún debate, sin embargo puntea en las encuestas.
Recientes sondeos del sitio RealClearPolitics le otorgan 3,8 % de las intenciones de voto a Pence, muy por detrás de Trump (53,2 %) y DeSantis (22,4 %), quien también apuesta por un discurso muy conservador, informó el alemán DW. En mayo, un estudio de la Universidad Quinnipiac le daba a Pence 48% de “favorabilidad” entre los republicanos y 35% de apreciación desfavorable, de acuerdo con reportes de medios audiovisuales. Trump, por su parte, cuenta con el 86% de favorables y 11% de desfavorables.
Y es que no se aprecian en la campaña electoral de Pence mayores diferenciaciones para captar preferencias. Los medios de comunicación lo distinguen únicamente como el republicano que desafía a Donald Trump para la presidencia de EEUU.
Centrado contra Trump en el debate presidencial
Pence procura avanzar en las elecciones primarias con una campaña basada principalmente en cuestionamientos a Donald Trump, a quien le fue leal cuando se desempeñó como su vicepresidente durante cuatro años (2017-2022). Algunas de las críticas de Pence contra Trump se centran en el asalto a la sede del Congreso de EEUU en enero de 2021, de quien se ha pretendido responsabilizar al expresidente Trump. También el exvicepresidente Pence resalta sus creencias evangélicas y su apego a la Constitución a lo que se refiere reiteradamente.
«Hoy, ante Dios y mi familia, anuncio que me postulo para presidente de Estados Unidos», afirmó Pence, cristiano evangélico confeso, en un video subido a las redes sociales, el 7 de junio, para rivalizar con el expresidente.
En una aparición en un foro televisado Mike Pence criticó duramente a Trump por el asalto al Capitolio que protagonizó una turba con el propósito de no permitir que se certificaran los resultados de las elecciones de 2020, donde Joe Biden ganó la presidencia. Pence también ha tenido críticas contra Trump por lo que califica como una relación del expresidente con Vladimir Putin.
En su oferta electoral, el aspirante republicano se declara contrario a los procedimientos de transición de género, antes de que la persona alcance los 18 años, asimismo se manifiesta como “firme defensor” de la legislación estatal que prohíbe estos métodos, lo que evidencia su formación de hombre «cristiano, republicano y conservador», como él mismo se define. Entre republicanos Pence esta considerado como ultraconservador.
Además, manifiesta ser enemigo del aborto, lo cual le ha restado popularidad. «No descansaremos ni cejaremos hasta que restauremos la santidad de la vida en el centro de la ley estadounidense en todos los estados del país», dijo Mike Pance, historiador y doctor en Derecho.
Quería ser cura pero fue político
Pence, nacido el 7 de junio de 1959, es el primero de seis hijos de una familia alemana-irlandesa, radicada en Indianápolis debido al trabajo de su padre en una empresa petrolera.
Durante sus estudios de Historia en la Universidad Hanover, luego de cursar en el colegio de St. Columbia, se convirtió al evangelismo, lo que facilitó su apegó a la religión cristiana. “Mike se adentró en una profunda transformación espiritual y llegó a considerar seriamente ser cura”, declaró su madre Nancy, en una entrevista en 2013, citada por El País, de España.
Sin embargo, en 1985 se casó con Karen, una profesora de primaria, con quien tuvo tres hijos con vidas «bastante discretas», según Vanity Fair.
Luego, Pence estudió Derecho en la Universidad de Indiana y se graduó en 1986, cuando decidió andar por el camino político, a pesar de la oposición de su padre, y presentó su candidatura para ser miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, en Washington.
Desde entonces, sus ideales políticos se identificaron con el ala ultraconservadora del Partido Republicano, aunque se le atribuye una breve estadía en el Partido Demócrata.
Fue gobernador de Indiana, señala su registro de vida, y como congresista fue uno de los promotores de la Patriot Act, un proyecto de ley que aprobó el Gobierno de George W. Bush como medida de seguridad para ampliar el acceso del gobierno a los datos personales de ciudadanos, luego de los atentados en las torres gemelas del Trade World Center, el 11 de septiembre de 2001. También se opuso a numerosas propuestas legislativas para solucionar problemas medioambientales, al igual que al matrimonio igualitario.
En fecha más reciente, según las noticias, se le relaciona con la posesión de documentos confidenciales de la Casa Blanca. En cuanto a salud, se registra que fue intervenido por una antigua afección cardíaca.