Estados Unidos oficializó este martes, en una ceremonia celebrada en París, su reingreso a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), tras cinco años de controversial ausencia.
La primera dama Jill Biden encabezó el acto de bienvenida al organismo desde la capital francesa, donde fue izada la bandera estadounidense, en medio de aplausos y la entonación del himno nacional, marcando el regreso formal de EEUU como miembro 194° de la UNESCO.
«Me siento honrada de estar con ustedes hoy al izar la bandera de Estados Unidos, símbolo de nuestro compromiso con la cooperación y la paz mundial», manifestó Biden en su discurso desde la sede de la agencia multinacional.
Afirmó que aunque el presidente Joe Biden entiende que solo no puede «contribuir a crear un mundo mejor», sí debe «mostrar» el camino. «Cuando ocupemos nuestro lugar dentro de esta coalición, podremos luchar por nuestros valores, como la democracia, la igualdad y los derechos humanos», aseveró la primera dama.
Jill Biden, quien estuvo acompañada de su hija Ashley Biden, expresó, además, que tanto ella como su esposo estaban orgullosos de que su país se haya reintegrado a la agencia cultural de la ONU, reseñó la agencia de noticias AFP. «Estamos tan orgullosos de reintegrarnos a la UNESCO», aseveró.
Retiro
En octubre de 2017, EEUU anunció su retiro de la UNESCO motivado, entre otras cosas, por el «continuo sesgo antiisraelí». La medida entró en vigor el 31 de diciembre de 2018.
«Esta decisión no se tomó a la ligera y refleja la creciente preocupación de EEUU con la deuda creciente con Unesco, la necesidad de una reforma fundamental de la organización y el continuado sesgo contra Israel en la UNESCO», informó el Departamento de Estado en ese entonces, mediante un comunicado.
En el año 2012 Estados Unidos había suspendido sus contribuciones a la agencia cultural de la ONU. Esto, luego de que el organismo aprobara la adhesión de Palestina como Estado miembro de pleno derecho, pese a las objeciones de EEUU e Israel.
Preocupado por China
El 8 de junio de este año, la administración de Biden propuso, mediante una carta enviada a la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, la reincorporación a la organización. La decisión obedeció a la creciente preocupación que le generaba la posibilidad de que China estuviera llenando el vacío que había dejado su ausencia, sobre todo, ante el establecimiento de los estándares internacionales para la inteligencia artificial y la educación tecnológica en el mundo.
La propuesta incluía un compromiso de saldar la deuda por sus atrasos, valorada en 619 millones de dólares. Además, EEUU se comprometía a financiar el 22% del presupuesto ordinario del organismo y a realizar contribuciones para programas destinados al acceso a la educación en África, la memoria de la Shoah y la protección de los periodistas, informó la UNESCO en un comunicado.
Para finales de junio, la UNESCO aprobó, con 132 votos a favor y 10 en contra, el reintegro de EEUU al organismo. Rusia, Corea del Norte, Palestina, Bielorrusia, China, Eritrea, Indonesia, Irán, Siria y Nicaragua fueron los países que estuvieron de la readmisión de EEUU.
Tras esta votación, el secretario de Estado de Estados Unidos firmó, el 11 de julio, el documento de aceptación de la Constitución de la UNESCO por parte de Estados Unidos, que posteriormente fue depositado formalmente ante el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, depositario de la Constitución del organismo.
Fuente: Diario las Américas