El fiscal especial John Durham concluyó que el FBI no debería haber lanzado la investigación sobre la supuesta vinculación de la campaña del expresidente de EEUU Donald Trump (2017-2021) y Rusia en las elecciones de 2016, en un informe publicado hoy tras una indagación de cuatro años.
En el reporte, de más de 300 páginas, Durham indicó que el FBI empleó información de Inteligencia «no corroborada, sin procesar ni analizar» para lanzar pesquisas sobre el equipo de campaña de Trump y sus posibles lazos con Rusia.
Durham fue designado en 2019 por el entonces secretario de Justicia, William Barr, durante el mandato de Trump para que examinara la investigación previa llevada a cabo por la agencia federal sobre los presuntos vínculos entre el equipo electoral del republicano y Moscú.Durham señala en el texto que responsables del FBI mostraron «una ausencia grave» de rigor analítico en el tratamiento de la información que recibieron, especialmente la relacionada con personas y entidades con afiliaciones políticas.
El manejo por parte del FBI de varios aspectos clave en este caso fue «gravemente deficiente», de acuerdo al fiscal especial, quien consideró que este fracaso a la hora de cumplir con su responsabilidad hacia el público causó un «daño severo» a la reputación de la agencia.
En su día, Barr abrió esta investigación tras la insistencia de Trump en que su campaña había sido objeto de espionaje antes de las elecciones de 2016 por parte de la inteligencia estadounidense, bajo las órdenes del entonces presidente, Barack Obama.
El reporte el lunes del fiscal especial John Durham es la conclusión largamente esperada de una averiguación para exponer una ilegalidad masiva por parte de las agencias policiales y de inteligencia. En lugar de ello, la investigación de Durham arrojó resultados decepcionantes.
“Nuevamente, el hecho de que el FBI no haya analizado críticamente la información que iba en contra de la narrativa de una relación colusiva entre Trump y Rusia exhibida a lo largo de Crossfire Hurricane es extremadamente problemático”, se lee en el informe.
“Crossfire Hurricane” fue el nombre en clave del FBI para su investigación.
Es probable que los hallazgos de Durham amplifiquen el escrutinio del FBI en un momento en que Trump nuevamente busca la Casa Blanca, y también ofrezcan un nuevo forraje para los republicanos del Congreso que han iniciado su propia investigación sobre la supuesta “politización» del FBI y el Departamento de Justicia.