Impulsado por el aumento de las compras y pedidos, el índice PMI, que mide el desempeño del sector, llegó en junio a su nivel más alto desde 2011 luego de caer a pozos históricos en abril y mayo en medio del “aislamiento preventivo obligatorio”, impuesto ante el avance del coronavirus y que el gobierno ha estado desmantelando desde entonces
La industria colombiana experimentó un fuerte repunte en junio como consecuencia de la flexibilización de la cuarentena impuesta meses antes para frenar la pandemia de coronavirus, de acuerdo a datos provistos por el banco Davivienda.
En concreto el Índice de Gestión de Compras (PMI) del sector industrial, publicado este miércoles por la institución financiera y citado por el portal Dinero, llegó a los 54,7 puntos en junio, comparado a los 37,2 puntos de mayo, en medio del aislamiento estricto.
Se trata del nivel más alto del PMI registrado desde 2011, según reportó la consultora Valora Analitik, y muy por encima del valor más bajo en la historia del índice, obtenido en abril de este año (27,6).
Así, la producción en Colombia creció por primera vez desde febrero, impulsado por las compras y los pedidos, y se registró un alza en la creación de nuevos puestos de trabajos, la más pronunciada en 22 meses, de acuerdo a los datos recabados en esta encuesta.
A la industria y la economía del país sudamericano aún le falta mucho, sin embargo, para recuperar los niveles de actividad previos a la cuarentena, en especial debido a las dificultades que están experimentando las empresas más pequeñas para abastecerse de materias primas en un contexto de pedidos atrasados, lo que cual ha aumentado costos y precios.
A esto se suma el crecimiento del desempleo general en Colombia por tercer mes consecutivo, debido al aislamiento y a pesar del repunte en la industria.
Pero más allá de esto, los datos publicados con respecto al crecimiento de la producción han generado más optimismo en la recuperación económica. En concreto, los niveles de confianza sobre el futuro de la industria llegaron en junio a su nivel más alto en cuatro meses y la mayor parte de las empresas colombianas espera ver crecimiento en el corto plazo.
El gobierno del presidente Iván Duque decretó el “aislamiento preventivo obligatorio” el 24 de marzo, en un intento por contener el avance del coronavirus en el país y a la vista de los estragos que la enfermedad estaba haciendo en ese momento en Europa.
La mayoría de los países del mundo adoptaron cuarentenas de este tipo, más o menos estrictas, conscientes del duro efecto económico que tales medidas pueden generar al poner un freno al consumo y la movilización de las personas.
De esta manera, Colombia comenzó a flexibilizar su cuarentena en abril y ya para comienzos de junio se habían habilitado gran parte de las actividades, incluyendo centros comerciales, en un intento de mitigar el golpe económico, al mismo tiempo manteniendo las restricciones fuertes para los adultos mayores de 70 años, los más vulnerables ante el nuevo virus.
Al momento, las actividades económicas que aún permanecen inhabilitadas en el país son los eventos de carácter público, la asistencia a bares, restaurantes y discotecas, los gimnasios, piscinas y saunas, los cines y teatros, y los casinos y bingos.
Según datos de la Universidad Johns Hopkins, que monitorea el avance de la pandemia en el mundo, Colombia ha registrado al momento 95.269 contagios y 3.376 muertos, cifras superiores a las registradas en países como Uruguay o Argentina pero inferiores a Brasil, Ecuador, Chile o Perú.