SANTIAGO.- El presidente de Chile, Gabriel Boric, condenó la persecución judicial por parte del régimen de Nicolás Maduro hacia la líder de las fuerzas democráticas, María Corina Machado, y Edmundo González Urrutia, presidente electo de Venezuela, según las actas electorales escrutadas.
El mandatario chileno rechazó la apertura de una investigación contra Machado y González Urrutia por parte de la Fiscalía General, controlada por el régimen, que se basa en una presunta ”instigación a la insurrección”.
“Ahora el régimen de Maduro anuncia persecución penal contra González y Machado, mientras reprimen a su propio pueblo que exige se respete su voluntad expresada democráticamente”, indicó el mandatario en su cuenta de X.
Boric exhortó, a su vez, a la dictadura chavista a respetar los derechos humanos de la disidencia opositora y los ciudadanos que se encuentran protestando en las calles de distintos estados de ese país, en rechazo a los resultados fraudulentos emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que declararon victorioso a Nicolás Maduro.
“Abogamos por el respeto a los derechos humanos de manifestantes y de los dirigentes de la oposición”, señaló el presidente chileno.
Investigación a Machado y González Urrutia
La investigación fue anunciada por el fiscal general, afín al régimen, Tareck William Saab, luego de que los líderes antichavistas difundieran un comunicado en el que hacen un llamado a las fuerzas militares y policiales del país a no reprimir al pueblo y hacer respetar los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio que, aseguran, dan como ganador a González Urrutia y no a Maduro.
En un comunicado, el fiscal impuesto por la extinta Asamblea Nacional Constituyente (ANC), indicó que el Ministerio Público venezolano iniciará las averiguaciones ante la “abierta incitación” a los cuerpos de seguridad del Estado, a la “desobediencia de las leyes”, por parte de Machado y Urrutia.
Además, el escrito indica que se les acusa de anunciar “falsamente” al margen de la Constitución y la ley a un ganador de las elecciones presidenciales “distinto al proclamado por el Consejo Nacional Electoral, único órgano calificado para hacerlo”.
A ambos dirigentes opositores se les atribuyó «la presunta comisión» de delitos como usurpación de funciones, instigación a la desobediencia de las leyes, instigación a la insurrección y conspiración.
El primer mandatario de Chile ha sido uno de los fuertes críticos de la izquierda latinoamericana al modelo oficialista de Nicolás Maduro iniciado por Hugo Chávez, siendo el principal líder de la comunidad internacional en exigir a las autoridades electorales venezolanas la transparencia en el conteo de los votos de los comicios presidenciales en Venezuela.
A diez días del proceso electoral, el mandatario ha reiterado su postura de no reconocer a Maduro como presidente electo, hasta conocer las cifras oficiales del proceso electoral venezolano, impugnado como fraudulento por la oposición venezolana, distintas organizaciones y la comunidad internacional.
Esto, luego de que el CNE, al mando del régimen, proclamó a Maduro como presidente reelecto con 52% de los votos frente a 43% del candidato opositor Edmundo González Urrutia, representante de la líder opositora inhabilitada María Corina Machado.
Rechazo del chavismo
El canciller venezolano, Yván Gil, y la vicepresidenta del régimen, Delcy Rodríguez, rechazaron en sus redes sociales las recientes declaraciones del presidente de Chile. Gil, en su mensaje, aseguró que el gobierno de Boric se arrodilla a la ultraderecha mientras que en Venezuela existe un “Estado fuerte y una justicia que protege al pueblo”, al tiempo que acusó al mandatario chileno de perseguir a quienes son de la izquierda.
Asimismo, resaltó que todos aquellos que en el país llamen a un «golpe de Estado a lo Pinochet» serán investigados y juzgados en el territorio nacional y le exhortó a no involucrar a Venezuela en sus «falencias ideológicas y democráticas».
Mientras que la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, calificó de “destempladas” las palabras de Boric que, a su juicio, solo pueden explicarse como “una ofrenda a su líder oculto Pinochet» o un “tributo” a Estados Unidos. «De cualquier forma es vergonzosa tanta rodilla doblada», expresó Rodríguez.