El Gobierno de Guatemala tomó nota de las once recomendaciones y análisis que realizó la misión especial de verificación de la Organización de Estados Americanos (OEA) en diciembre pasado por la crisis política que enfrentó el país, aseguró este miércoles el canciller, Pedro Brolo.
El ministro de Relaciones Exteriores indicó en una rueda de prensa que Guatemala «confía en poder construir conjuntamente con la OEA una agenda de trabajo» y «cooperación» a partir de la política del Gobierno que preside Alejandro Giammattei y de las recomendaciones de la misión especial de la entidad regional.
Brolo agregó que Guatemala tiene interés en que la OEA acompañe y coopere en las recomendaciones formuladas por la misión especial y en la política general del Gobierno de Giammattei, principalmente en temas relativos al combate a la corrupción y al narcotráfico.
Además, indicó que el Gobierno también se inclina en el acompañamiento de la OEA para «lanzar espacios de diálogo y concertación nacional entre distintos sectores del país», así como en otras aristas como el Gobierno abierto, el acceso a la información, la política de datos abiertos y la «cooperación jurídica en transparencia».
La misión de la OEA estuvo en Guatemala del 27 de noviembre al 2 de diciembre y su delegación se reunió durante dicho período con varias entidades estatales y representantes de la sociedad civil.
SIN REFERIRSE AL GOLPE DEL ESTADO
Consultado por periodistas sobre las observaciones de la misión especial acerca del supuesto intento de golpe de Estado denunciado en su momento por el Gobierno de Giammattei, Brolo negó que la solicitud inicial del acompañamiento fuera ese motivo.
«Al invocar la carta democrática (el 22 de noviembre pasado) se hizo específicamente invocando el artículo 17, capítulo cuarto, que es un capítulo específicamente preventivo que tiene dentro del mecanismo interamericano para poder garantizar que los procesos se lleven en paz, armonía y que se den las condiciones necesarias para garantizar la institucionalidad democrática», puntualizó.
El canciller añadió que «a raíz de los problemas y de las crisis y coyuntura social que se vivió consideramos importante que nunca es prematuro hacer un llamado al diálogo, a la paz, a la concentración y por eso consideramos que era importante poder tener el acompañamiento de una misión especial como lo fue en este caso».
Brolo no se refirió al supuesto intento de golpe de Estado y aseveró que el trabajo de la misión especial, que encabezó el exdiputado argentino Fluvio Pompeo, fue para «reunirse con distintos sectores para conocer ideas, pensamientos, los retos que se tienen en Guatemala, no solamente del Gobierno».
El canciller mencionó que agradeció en una llamada telefónica a Pompeo y al propio secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro, por el trabajo de la misión y por las once recomendaciones vertidas.
El pedido del Gobierno de Giammattei a la OEA fue solicitado el 22 de noviembre y en un comunicado de prensa divulgado ese día se detalló que obedecía en parte a que «grupos minoritarios buscan forzar un verdadero golpe de Estado».
En su informe, la OEA había recomendado a Guatemala garantizar las investigaciones, enjuiciamientos y sanciones de actos de corrupción; redoblar esfuerzos para eliminar la impunidad; mejorar el acceso a la información y la transparencia en los asuntos públicos y transparentar la conformación de los presupuestos públicos.
También urgió al Congreso a realizar el proceso de elección de magistrados a la Corte Suprema de Justicia y de Apelaciones, que lleva más de un año estancada e instó «garantizar un procedimiento transparente para la renovación de la Corte de Constitucionalidad», sobre cuya entidad también pidió respetar su independencia.
EL ORIGEN DE LA CRISIS
El Gobierno de Giammattei entró en crisis el pasado 21 de noviembre cuando más de 10.000 guatemaltecos se manifestaron en su contra frente al Palacio Nacional de la Cultura (sede del Gobierno), y otros cientos quemaron una parte del Congreso, a solo un kilómetro de distancia.
Las protestas se originaron por la aprobación el 17 de noviembre de un opaco presupuesto para 2021 por parte del Congreso, donde Giammattei cuenta con mayoría con base en alianzas. Además, el 20 de noviembre, el vicepresidente del país, Guillermo Castillo, instó a Giammattei a renunciar en conjunto por el bienestar de los guatemaltecos.