Pensar o creer que la economía en Venezuela se recuperará es inútil. Será un tiempo perdido para quienes guardan esperanzas, porque el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta más contracción en 2022 para el país bajo el régimen de Nicolás Maduro.
El desplome del Producto Interno Bruto (PIB) será de otro 5 % menos el próximo año y con ello el ingreso per cápita —cálculo que representa el promedio entre la riqueza de la nación en bienes y servicios con el número de habitantes— se ubicará en apenas 1501 dólares por persona.
La cifra rezaga a Venezuela al reglón de los más pobres, considerando que la estimación para Haití alcanza a 1938 dólares para el mismo periodo, a pesar de sus catástrofes naturales y conflictos políticos que traviesa.
Los números rojos revelan que el socialismo de Maduro reducirá el PIB a 40403 millones de dólares y con esta cantidad Venezuela tendrá una economía sólo por encima a Honduras que rondará 26161 millones de dólares y El Salvador con 26277 millones de dólares. Un pequeño margen la mantendrá por encima de Paraguay que rondará los 37836 millones de dólares.
Un retroceso con abismo
«La proyección de las perspectivas económicas en Venezuela, incluyendo la evaluación de la evolución económica pasada y actual como base para las proyecciones, es complicada por la falta de discusiones con las autoridades (la última consulta tuvo lugar en 2004), la comprensión incompleta de los datos reportados y las dificultades para interpretar ciertos indicadores económicos reportados dada la evolución económica», advierte el FMI.
De esa manera, la instancia internacional deja abierta la posibilidad de que el escenario real que se produzca sea peor. Al mismo tiempo, confirma que Maduro provocó un retroceso que tardará años en subsanarse.
Fracaso al tiple
En el fondo de los datos del Fondo Monetario Internacional está la realidad: Venezuela triplica el número de pobres de Haití.
En Latinoamérica hay 18.5 millones de pobres y la mitad de ellos está en Venezuela. La nación reporta 9.3 millones mientras que Haití registra 3.7 millones.
Es una tragedia que se constata en el ingreso mensual de los jubilados, pensionados y trabajadores del sector público que perciben 67 centavos de dólar, un monto irrisorio, en una nación donde se necesitan entre 200 y 300 dólares para adquirir la canasta básica de productos.
La Organización de las Naciones Unidas identificó esta deplorable realidad en febrero y ubicó a Venezuela como la cuarta nación con la peor crisis alimentaria del mundo. El primer país en esa lista fue Yemen; el segundo, la República Democrática del Congo; y el tercero, Afganistán. Esos tres países atraviesan guerras civiles y conflictos bélicos. En el quinto lugar, después de Venezuela, está Etiopía.
Futuro negro
Otros indicadores empeoran la situación. En cuanto a la inflación que el año pasado cerró en 2355 %, este 2021 estará en 5500 % ocasionando que los precios aumenten 55 veces.
El panorama no cambiará a corto plazo porque el FMI espera un alza de precios similar en 2022. Asimismo, el texto indica que la próxima tasa de inflación más alta esperada para este año 2021 en la región estará en Argentina.
Las consecuencias inmediatas de ello será el cese de los puestos de trabajo y menos empleos formales bien remunerados Según el FMI el desempleo se ubicará en 60 % en 2022, contra 58% este 2021.
Pero Maduro dice que «no descansa un día» y tiene el «oído profundo para escuchar al pueblo y saber dónde poner la mano principal».