La elección del próximo presidente de la mayor potencia mundial no solo llama la atención de quienes habitan en Estados Unidos y deban acercarse a la urnas el próximo mes de noviembre. Al proceso también lo observan otros gobiernos del mundo, especialmente aquellos que la consideran su mayor enemigo, como China o Irán. Este último habría activado una campaña en línea para hacer creer a los votantes que fue falso el atentado contra la vida del expresidente y candidato republicano Donald Trump.
Detrás estaría la Unión Internacional de Medios Virtuales (IUVM, por sus siglas en inglés), difundiendo en Internet que “el intento de asesinato del expresidente Trump fue organizado por su campaña para aumentar el apoyo”, según la firma de inteligencia cibernética Recorded Future. Esto no hace más que confirmar que regímenes anti-Occidente quieren evitar a toda costa el regreso del exmandatario republicano a la Casa Blanca.
Para difundir esa narrativa emplearon varias plataformas y así aumentar la polarización entre los votantes. No es una técnica nueva y la prueba está en las sanciones que impuso el Departamento de Estado contra la IUVM por intentar manipular la presidenciales estadounidenses en el año 2020. Este organismo dirigido por el régimen islámico quedó calificado como “brazo de propaganda” junto a la Unión de Radio y Televisión Islámica de Irán (IRTVU).
Así funciona la manipulación iraní
El régimen en Teherán niega tener las manos metidas en las elecciones estadounidenses aunque la firma de inteligencia cibernética reporta todo lo contrario. Estiman que “el ciclo de retroalimentación entre Irán y los extremistas de EE. UU. —que adoptaron la narrativa— continuará a medida que se acerquen las elecciones “, de acuerdo con una reseña de The Washington Times.
Este tipo de campañas funcionan de manera muy sutil: muestran a los usuarios de internet información falsa o manipulada que polariza sus ideas. Como resultado, el ambiente social se vuelve más hostil, sin mencionar que también termina afectando a los candidatos. El propio régimen iraní lo ha puesto en práctica contra los ciudadanos de su país al utilizar su maquinaria de propaganda estatal para mentir y “avivar las llamas del odio contra Estados Unidos”, dicho anteriormente por el Departamento de Estado.
De manera que todo esto no es nuevo mas sí representa un riesgo para el ambiente electoral en EE. UU. No es casualidad que la campaña republicana haya denunciado esta misma semana que sus comunicaciones internas fueron hackeadas desde Irán. El FBI está investigando este y otro presunto ataque informático contra la campaña demócrata según Reuters.
El caos promovido por China
A los ataques de Irán contra las elecciones estadounidenses se suma el Partido Comunista Chino (PCCh). La Oficina del Director de Inteligencia Nacional entregó meses atrás un informe al Congreso para advertir que así como el régimen de Xi Jinping usó TikTok para influir en las elecciones de medio mandato de 2022, también podría intentar interferir en los comicios de este año.
La técnica es la misma que sus pares en Teherán para ampliar las divisiones en la sociedad estadounidense, según el informe. Para ello, hace dos años usó cuentas en TikTok que perjudicaron la imagen de candidatos tanto del Partido Demócrata como del Republicano. Es como llevar a la práctica el refrán “divide y vencerás”.
Las advertencias ya están hechas mientras que trascienden informaciones, como que la empresa Microsoft identificó un grupo iraní “lanzando sitios de noticias encubiertos para atraer a los votantes, incluido uno que insultaba a Trump”.