Más poderosos que el mismísimo Pablo Escobar. Más buscados que el Chapo Guzmán. Con más tentáculos que Dawood Ibrahim Kaskar y Fran Lukas y con más estrategias que Lucky Luciano, hoy el Cartel de los Soles, vinculado al régimen de Nicolás Maduro, es uno de ”los más temidos del mundo» por su capacidad para traficar drogas con impunidad. Así lo señaló el presidente de Colombia, Iván Duque.
Desde el Palacio de Nariño, sin titubeos, el mandatario afirmó que “el narcotráfico” es el “arma” de esta organización que sostiene relaciones con grupos criminales en Irán y Turquía, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la Narcotalia, y en México con La Familia, el Cartel de Sinaloa y los Zetas.
Su afirmación quiere que se multiplique porque en “todos los escenarios hay que llevar el tema” que además es la causa de la crisis humanitaria, la falta de institucionalidad y de prensa libre en Venezuela, asegura el mandatario.
«No podemos ser ingenuos. Hay que entender que lo que hay en Venezuela es una narcodictadura que propicia estos fenómenos. Y que es esa narcodictadura la que ha destruido la separación de poderes, la prensa libre, el aparato productivo y la que ha desencadenado esta gran crisis humanitaria; y por lo tanto, en los escenario internacionales, multilaterales y bilaterales tenemos que llevar este tema».
La denuncia de Duque se une a la de Estados Unidos, que bajo el mandato de Donald Trump, acusó formalmente a varios miembros del régimen como parte de una red narcoterrorista que, junto al Cartel de los Soles y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se encarga de enviar cocaína a territorio estadounidense desde hace dos décadas, indica El Tiempo.
Pandemia lucrativa
Mientras Venezuela se consume por la crisis del coronavirus, la organización se fortalece con la pandemia. Así lo evidencia la Voz de América. Según el medio estadounidense, el Cartel de los Soles amplía sus ganancias en medio de la emergencia sanitaria con el incremento de la producción de cocaína a 300 toneladas métricas.
El decreto de Estado de emergencia en Colombia desde marzo, así como el despliegue de 87000 uniformados de las Fuerzas Armadas y efectivos de la Policía Nacional para garantizar el orden y la seguridad durante la cuarentena, favorecieron los negocios del Cártel de Los Soles, apunta VOA.
La línea de lo ilícito
A través de los estados fronterizos con Colombia, es decir, Apure, Zulia y Táchira “compran los cargamentos de cocaína” los integrantes del Cartel de Los Soles, destaca El Tiempo. Las rutas de distribución aérea que se cubren suelen ser hacia República Dominicana y Honduras o por tierra hacia Surinam y de ahí hacia África y Europa.
Un artículo de Insight Crime titulado Narcotráfico en el régimen venezolano: El «Cartel de los Soles» señala que “los narcos colombianos dirigen el negocio de la droga en Venezuela y pagan a la Guardia, encargada de cuidar la frontera, para permitir el paso de la mercancía”.
Injerencia con lucro
La mano del poder tiene un impacto: “la escala de la cocaína pasando por Venezuela es gigantesca», sostiene El Tiempo. Las dudas pierden espacio cuando en su informe de 2019, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), organismo enmarcado en Naciones Unidas (ONU) y encargado de vigilar la aplicación de los tratados de fiscalización internacional de drogas, menciona al Cartel de los Soles en el tráfico de estupefacientes.
Para la JIFE «hay indicios de que en Venezuela los grupos delictivos han logrado infiltrarse en las fuerzas de seguridad gubernamentales y han creado una red informal conocida como el ‘Cartel de los Soles’ para facilitar la entrada y salida de drogas ilegales», así se lee en el reporte de la JIFE publicado en febrero de 2020.
El Estado en el negocio
El Cartel de Los Soles, como otras organizaciones, -FARC o ELN- “comenzó a trabajar por ideología para luego convertirse en un cártel de narcotráfico con la diferencia de que no lo manejan líderes guerrilleros, sino la cúpula de un gobierno y un Ejército corrupto”, sostiene BBC.
Varias voces mantienen esta versión. Una de ellas es la de Jeremy McDermott, codirector y cofundador de Insight Crime, un centro de investigación sobre crimen organizado en América Latina y el Caribe, que lo considera «un grupo de círculos o redes dentro del régimen chavista que facilitan, protegen o participan en el narcotráfico», según declaraciones publicadas por la cadena británica.
Sin embargo, Venezuela en comparación con México y Colombia tiene particularidades. Una de ellas “es que dentro de Venezuela un buen porcentaje del negocio está manejado por el Estado que convierte al país en una ruta de tránsito principal de cocaína no sólo hacia Estados Unidos sino hacia Europa y Brasil”.
Un paraíso
Por el escenario que describe la dependencia de la ONU, Venezuela es ahora un “paraíso” para los narcotraficantes por el “apoyo” y la “cooperación” del régimen, asegura el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, el almirante Craig Faller, según reseña la Voz de América.
Los archivos encontrados en los computadores del fallecido portavoz y asesor del Bloque Sur de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Raúl Reyes, condujeron a Estados Unidos a apuntar a que varios funcionarios tenían relación con los negocios de narcotráfico de las FARC, entre estos Hugo Carvajal; Ramón Rodríguez, exministro del Interior, Diosdado Cabello y Néstor Reverol».
Los negocios a los que se refiere el medio colombiano se ejecutan a través del “cobro de porcentajes” o “trasporte” de droga para tráfico internacional y abastecimiento al tráfico nacional, contrabando de gasolina, minería irregular, explotación de madera, reventa de productos regulados, tráfico de armas y municiones en el sistema carcelario, divulga La Razón.
Y eso representa, según analiza VOA, una amenaza para la seguridad del hemisferio occidental que desde Washington están dispuestos a impedir mediante el trabajo y las operaciones conjuntas con 22 naciones.
Fuente: PanamPost