Es inevitable comparar a la vicepresidente de Estados Unidos, Kamala Harris, con su homóloga argentina, Cristina Kirchner. Existen diferencias obvias. La segunda al mando en el país sudamericano viene de haber ejercido la presidencia, mientras que Harris acaba de asumir por primera vez un alto cargo en el Poder Ejecutivo. Sin embargo, la edad y los recientes episodios de posibles síntomas de demencia senil del presidente Joe Biden han servido la mesa a la especulación. Pero eso no es todo. La vicepresidente de EE. UU. ha estado asumiendo funciones propias del presidente sin que haya solicitud expresa del mandatario por ausencia temporal, lo que lleva a plantear dos preguntas válidas: ¿Quién manda realmente en la Casa Blanca? ¿Está Kamala Harris comenzando a tomar el poder?
Este martes Kamala Harris sostuvo una llamada telefónica con la primer ministro de Noruega, Erna Solberg, en la que afirmó “su compromiso de profundizar la fuerte alianza entre Noruega y Estados Unidos”, según reseñó Fox News. Pero la comunicación entre la número dos del Gobierno estadounidense y la número uno de la Administración noruega se dio de manera independiente, sin la participación del presidente Joe Biden.
No es la primera vez que ocurre esta situación en apenas mes y medio del binomio demócrata en el poder. Harris ya se ha comunicado en solitario con el presidente de Francia, Emanuel Macron; el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau; y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. Eso ocurrió poco después de que el presidente Biden realizara una llamada a Macron y Trudeau.
¿Usurpación progresiva?
En declaración ofrecida a PanAm Post, el abogado constitucionalista y analista republicano, Lorenzo Palomares, aclaró que la política extranjera le corresponde al presidente. “Es él quien tiene que dar la cara”. En este sentido, explicó que de acuerdo con las funciones del vicepresidente de Estados Unidos, quien ejerce este cargo puede hablar con otro vicepresidente o canciller pero no con el homólogo del presidente”.
“La percepción de que Kamala está usurpando funciones es real y veraz. Esto indica la incapacidad de Biden, que es un anciano títere del Partido Demócrata. Harris se quedará con el poder de Biden pronto”.
Las frecuentes llamadas de Kamala Harris con líderes mundiales demuestran el interés por involucrarse profundamente en la política exterior y presentarse como la eventual heredera de Joe Biden ante la posibilidad de que no culmine su mandato. Pero en todo caso estaría asumiendo funciones que no le corresponden ni se le han atribuido por los mecanismos constitucionales.
“En escasos eventos, el presidente puede enviar a un emisario como el vicepresidente, que en este caso es Kamala Harris. Pero el vicepresidente no puede ser la cara pública de la política exterior del país. Y mucho menos intercambiar política pública con un presidente de otro país”, sentencia el abogado constitucionalista, Lorenzo Palomares, a PanAm Post.
Tal como lo explica Palomares, el vicepresidente puede representar al presidente cuando este se lo solicita en ocasiones puntuales. Por ejemplo, durante la pasada Administración, Donald Trump le encargó a Mike Pence comunicarse con los mandatarios de Canadá, Ucrania, Colombia, Irak, Argentina y Australia, según recuerda Fox News. Sin embargo, fueron seis líderes con los que Pence se comunicó en cuatro años de Administración, mientras que Kamala Harris se ha puesto en contacto directo en solitario con cuatro en tan solo mes y medio del nuevo gobierno.
¿Está Biden a cargo?
La edad y los episodios que han mostrados posibles síntomas de demencia senil de Joe Biden han permitido que Kamala Harris asuma un protagonismo más activo. Han sido varios los casos recientes que han dado cabida a las especulaciones sobre la salud del nuevo inquilino de la Casa Blanca. El más preocupante ocurrió a finales de febrero, cuando Biden confundió el nombre de una congresista durante una visita a un centro de vacunación en Texas y al verse perdido se preguntó en pleno discurso “¿qué estoy haciendo aquí?”.
Pero hay un incidente similar más reciente. Este lunes, Joe Biden no logró recordar del nombre del centro de defensa de Estados Unidos –el Pentágono– ni tampoco el de su secretario de Defensa, quien se encontraba a pocos metros del mandatario e intervendría a continuación.
Durante la campaña, Biden también tuvo un tropiezo de este tipo. En pleno discurso en Filadelfia, el entonces candidato demócrata confundió a su nieta con su hijo Beau Biden, quien falleció a causa de un cáncer cerebral en 2015.
Ante esta situación que se viene haciendo más común, la vicepresidente Kamala Harris se esfuerza por ganar terreno diplomático y mediático como la eventual presidente a la espera de posesionarse de la oficina Oval.
Fuente: PanamPost