El preso político más importante del régimen de Nicolás Maduro ya no está en Venezuela, salió y nadie del chavismo hizo algo para impedirlo.
Permaneció bajo vigilancia técnica y humana desde que salió de los calabozos de la cárcel militar de Ramo Verde a cumplir régimen de arresto domiciliario en el 2017, luego de pagar 3 años por presunta asociación para delinquir e incitación a la violencia.
El 30 abril del 2019 en horas de la madrugada apareció en fotografías y videos a través de las redes sociales en una movimiento cívico militar contra Nicolás Maduro que mas tarde no se pudo concretar. De allí estuvo como huésped de la residencia del embajador Español, hasta el sábado 24 de octubre cuando salió del país a reencontrarse con su familia en España.
Una alta fuente dentro del régimen chavista aseguró a El Tiempo que “se le tenía vigilancia electrónica y humana. Y el dispositivo estaba reforzado por colectivos chavistas. La logística para sacarlo de allí, financiera y tácticamente, debió ser robusta”.
Luego de su salida y en su primera entrevista el líder político venezolano le dijo a CNN que no puede dar detalles de su salida de Venezuela. “No lo hago, para proteger la integridad de las personas que me ayudaron”.
Sin embargo, el diputado del Parlamento Europeo por España, Leopoldo López Gil, padre del líder opositor venezolano, dio algunas pistas de cómo salió su hijo de la residencia consular española en Caracas, una gran estructura protegida por un alto muro columnas de concreto armado y acero de por lo menos tres metros de altura.
López Gil dijo que la “ruta clandestina de escape” incluyó a Colombia en su periplo. De Caracas a la frontera con Colombia pudo haberse tardado al menos 12 horas y media, en una vía invadida por férreos controles policiales previstos por el régimen, con el argumento de evitar el viaje de personas sin tomar las precauciones sobre la COVID-19, pero que ha sido denunciado por robar y humillar venezolanos que salen y entran por Colombia.
Sin embargo, se cree que el político fundador del partido Voluntad Popular, tuvo que ser movido en helicóptero, en una ruta que no toma más de 3 horas.
No obstante a la versión de Colombia salió otra que involucra a Aruba. Según algunas fuentes Leopoldo López salió por Puerto Cabello, en el estado Carabobo, hacia Aruba, en un recorrido de 770 kilómetros. Desde Caracas en avión ese trayecto puede llevar poco menos de una hora.
Johan Obdola, analista de seguridad venezolano, señala, que en cualquiera de los casos, Leopoldo López tuvo que contar con el apoyo de un importante sector del chavismo para burlar los controles.
Incluso, Obdola va más allá y agrega que el plan habría salido de una negociación de cara a las elecciones parlamentarias convocadas en Venezuela para el próximo 6 de diciembre.
“Acá no hubo una aventura con tintes de heroísmo. Esto fue coordinado por las cadenas de mando de Diosdado Cabello, Gustavo González (actual director del Sebin) y el embajador de España, Jesús Silva”, dijo el analista a El Tiempo.
Luego de su llegada a España, llama la atención, que inmediatamente el líder opositor se reunió con el Jefe de Gobierno, Pedro Sánchez para luego anunciar que impulsará unas prontas elecciones en Venezuela a pesar de que que se sabe “que no existen las condiciones”.
Cabe destacar que no es la primera vez que se mencionan que fichas del régimen estén buscando negociar para salir del atolladero que se encuentran. El libro del ex asesor de seguridad del gobierno de Estados Unidos John Bolton menciona que Maikel Moreno, presidente del Tribunal Supremo de Justicia al servicio de Nicolas Maduro, y los generales Vladimir Padrino e Iván Hernandez Dala, están entre ellos.
Una fuente entregó a El Tiempo una carta de 2019 en la que el exdirector del Sebin, general Manuel Ricardo Cristopher Figuera, le dice a Cabello que Moreno, Padrino y Hernández han buscado una salida “para la calamitosa situación del país”.
Figuera, que en la actualidad está en el exilio, menciona en la carta que pudo tener acceso a un documento de 20 páginas en donde se habla del tema, para presuntamente “salvar a la patria de la que solo quedan andrajos” e incluso se buscaban alternativas para los sancionados por Estados Unidos.
Esa carta en poder de El Tiempo, arroja aún más datos. La misiva asegura que el mismo general le propuso a Maduro una acción política dentro de la constitución, en la que él pusiera la agenda: “Maduro sabe muy en el fondo que no le mentí jamás y que la corrupción gubernamental en su gestión es alta”.
Sin embargo, el escape de López motivó intensos operativos del Sebin, que incluyeron rondas en la casa del embajador en Caracas y las detenciones temporales del encargado de seguridad y colaboradores de Leopoldo López.
Otros funcionarios perseguidos por el régimen de Nicolás Maduro que también pudieron fugarse para salir del país, han confirmado a que obligatoriamente han necesitado “gente adentro” para poder salir del país.
Sucedió con la la fuga de la fiscal general de la República Luisa Ortega, quien llegó a Colombia desde Aruba, hasta donde se movió en lancha desde la Península de Paraguana.
Lo mismo ocurrió con el ex alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, encarcelado en Ramo Verde desde el 2015 hasta el 2017, por una medida de casa por cárcel. Un año más tarde escapó de su casa cruzando 29 puestos de control en un tramo de 800 kilómetros para llegar a Cúcuta, desde donde voló a Madrid, donde permanece ahora.
Otro escapista es Hugo “El Pollo” Carvajal, quien repitió se huida de España cuando negociaba su entrega con la DEA.
A la lista de funcionarios de la oposición venezolana en el exilio se suman Ramón Muchacho, ex alcalde de Chacao y el diputado Fredy Guevara, asesor y hombre de confianza de Leopoldo López.
Fuente: Primer Informe