SONIA SCHOTT,
La frase «lo que no te mata, te hace más fuerte» fue originalmente acuñada por el filósofo alemán del siglo XIX Friedrich Nietzsche y se basa en la idea de que, al pasar por experiencias difíciles, las personas se fortalecen para el próximo evento.
Está afirmación de resiliencia sirvió también de inspiración para la canción Lo que no te mata, te hace más fuerte, lanzada como parte del álbum Stronger de la cantante estadounidense Kelly Clarkson en 2012, que encabezó la lista Billboard Hot 100 y fue nominada a tres premios Grammy.
Y es que la idea es fuerte y atractiva, pues juega con la posibilidad de que siempre podemos estar en control de una crisis, entendida como “un cambio profundo y de consecuencias importantes en un proceso o una situación dada”, según la Real Academia de la Lengua Española.
Una traducción inexacta consideraba que la palabra crisis en chino WEI JI significaba tanto un desafío como una oportunidad. Sin embargo, no es cierto según los entendidos, dado que el carácter ji, por sí solo, no significa necesariamente oportunidad.
Si algo es cierto es que el concepto implícito, atrae.
Fue John F. Kennedy, el presidente número 35, quien dijo durante un discurso en Indiana en 1959: “En una crisis, hay que ser consciente del peligro, para reconocer la oportunidad”.
De igual manera, la idea de que una crisis se puede transformar en algo positivo es un concepto muy extendido, especialmente en el área de las comunicaciones estratégicas que predican no centrarnos en los aspectos negativos y descubrir los posibles beneficios y oportunidades en una situación critica.
Y si la política es el arte de lo posible o lo imposible en tiempos de crisis, la foto policial de Donald Trump será la imagen de la campaña presidencial de 2024.
¿Le ayudará a ganar o perder la Casa Blanca?
Lo extraordinario del presidente 45º de Estados Unidos es que todo lo que hace, ya sea publicar una fotografía, parte de un expediente delictivo tras ser acusado de ofensas penales o boicotear el debate televisivo con sus rivales republicanos, siempre se las arregla para salir como ganador.
Verlo salir de la cárcel del condado de Fulton, en Georgia, en un enorme convoy de vehículos produjo otra imagen icónica, además de la imagen con el ceño fruncido y las cejas arqueadas, que ya se convirtió en viral, garantizando el máximo impacto promocional.
Ahora sabemos por qué Trump decidió no participar en el debate televisivo en Milwaukee: contaba con que la gran noticia de la semana seria su aparición en la cárcel del condado de Fulton, relegando el debate republicano a un espectáculo secundario.
La mayoría de los candidatos la pasaron discutiendo entre sí. Algunos tuvieron un desempeño razonablemente bueno, incluidos el exvicepresidente Mike Pence, la exembajadora ante Naciones Unidas Nikki Haley o la nueva revelación del momento el empresario Vivek Ramaswamy.
Trump, por su parte, siempre se ha mostrado confiado de mantener las preferencias del público y este primer debate televisivo le confirmo que nadie, todavía, tiene posibilidades de superarlo. El único obstáculo son los juicios.
El hecho de que sus abogados hayan estado tratando de retrasar los procesos penales para evitar interferencias con la campaña presidencial, muestra que están preocupados por las consecuencias impredecibles de que un jurado encuentre al expresidente, culpable de los cargos.
Nadie sabe realmente qué pasaría después. ¿Puede un candidato presidencial, condenado, continuar haciendo campaña para la Casa Blanca y ejercer como presidente si se le condena a prisión?
Entre tanto, la foto de Trump, desafiante, aparecerá en todas partes y ninguno de sus rivales podrá escapar a esa imagen mientras sus seguidores se volverán aún más devotos de él, con el paso de los meses porque además representa a Trump contra la administración de Joe Biden.
Cuando Chris Christie, el exgobernador de Nueva Jersey, apareció en el debate, la semana pasada, criticando a Trump, la audiencia lo abucheó y es que afirmar que Trump no es apto para ser presidente, ciertamente no persuadirá a sus partidarios para cambiar lealtades.
Así que la foto policial es ahora la única imagen que cuenta en las elecciones presidenciales. Es un hecho extraordinario, pero, parece cierto que, lo que no te mata, te hace más fuerte.