El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha apuntado que, pese a que Rusia «no puede quedarse» con todo el territorio ganado en Ucrania, es probable que sí mantenga el gobierno sobre Crimea; mientras que en Kiev tienen admitir que «no puede tener todo lo que quiere».
Según Lula, el presidente ruso, Vladimir Putin, tiene que asumir que «no puede quedarse con la tierra en Ucrania». «Tal vez Crimea no se discuta, pero habrá que repensar lo que invadió después», ha manifestado el mandatario brasileño, según recoge el portal de noticias G1.
Respecto al presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, Lula considera que tiene que darse cuenta de que «no puede tener todo lo que cree que va a tener», y ha incidido en que la Alianza Atlántica «no podrá asentarse en la frontera» con Rusia.
«Todo esto es un tema que tenemos sobre la mesa», ha trasladado el presidente brasileño, quien viajará a China el próximo martes para abordar junto con su par Xi Jinping la situación en Ucrania, entre otros asuntos.
Está previsto que Xi y Lula firmen una serie de acuerdos, entre los que se incluya una propuesta conjunta para el fin de la guerra. Tanto Brasilia como Pekín se han mostrado en ocasiones equidistantes con las hostilidades en Europa del Este, y han sido acusados de decantarse del lado ruso.
Pekín formuló ya una propuesta de paz el pasado mes de febrero que, sin embargo, fue rechazada por gran parte de la comunidad internacional pues apuntaba a un cese de hostilidades en las posiciones actuales, legitimando entonces la presencia de tropas rusas en territorio ucraniano.
Brasil, por su parte, también se ha mostrado dispuesta a remar en favor de la paz en Ucrania, si bien su propuesta ha ido siempre encaminada en establecer una vía de diálogo con las partes en conflicto y en la que participen países ajenos a las hostilidades.