En Juntos por el Cambio, la diversa coalición opositora al kirchnerismo en Argentina, Luiz Inácio Lula da Silva es un personaje popular. Varios de sus principales referentes, como el intendente porteño y precandidato a presidente Horacio Rodríguez Larreta, celebraron el triunfo del PT anoche en Brasil. Como uno de los portavoces del “ala dura” del espacio, Miguel Ángel Pichetto, reconoció la gestión de Jair Bolsonaro y lo apoyó abiertamente antes de la primera vuelta y en las instancias previas al balotaje, donde se impuso la izquierda. Con los resultados arriba de la mesa, el excandidato a vicepresidente de Mauricio Macri señala que el mandatario recién electo regresa con un margen de maniobra muy pequeño y sin ningún espacio para cualquier tipo de “actitudes chavistas”.
Pichetto, junto a dirigentes como la presidente del PRO, Patricia Bullrich, son los partidarios de un retorno de la coalición muy diferente a lo que fue la presidencia de Macri. Plantean la necesidad de un “capitalismo” con todas las letras, una reforma laboral concreta y una política agresiva en materia de seguridad. Desde el cargo actual de la Auditoría General de la Nación, Pichetto lidera el “ala peronista” de Juntos por el Cambio y mantiene un perfil diferente al de Larreta, la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica.
En su opinión, el discurso de Lula de ayer abordó «algunos temas interesantes», por lo que considera que el nombramiento de su próximo ministro de Economía será una figura de vital importancia. Al respecto, indicó lo siguiente: «Creo que va a elegir a un hombre de formación ortodoxa para dar previsibilidad al mercado».
Para el peronista, el resultado ajustado ya dejó marcado el camino para Lula, y muestra a primeras luces un gobierno muy condicionado. «Tendrá que ir hacia el centro en su gestión. Jair Bolsonaro maneja ambas cámaras junto a sus partidos aliados y se ha quedado con gobernadores importantes, como el de San Pablo», señaló.
En cuanto al tema de la polarización, el referente de JxC alegó que «el resultado fue extremadamente equilibrado» y destacó la importancia que los comicios se hayan realizado en paz. «Eso es un dato positivo para el país más importante de América Latina, que es Brasil».
A juicio de Pichetto, Lula «es un hombre muy experimentado», que llega a un nuevo mandato presidencial con total claridad y conocimiento sobre su «poder acotado». Entre los principales desafíos que tendrá el izquierdista, de acuerdo con el dirigente opositor argentino, se destacará «la búsqueda de la reconstrucción de la unidad del país».