MIAMI- En una entrevista realizada por el periodista César Miguel Rondón, tres madres venezolanas relataron los desgarradores testimonios de las torturas que sufrieron sus hijos a manos de las autoridades policiales del régimen venezolano.
Estos jóvenes, detenidos en el contexto de las protestas tras los resultados electorales del pasado 28 de julio en el estado Carabobo, han vivido episodios de violencia física y psicológica que han estremecido a sus familias.
«Torturas»
Lireny Molina, madre de Orlando Espinosa, compartió el calvario que comenzó el 30 de julio, cuando su hijo, de tan solo 15 años, fue detenido mientras jugaba baloncesto en una cancha cercana a su hogar. Molina relató que Orlando fue brutalmente golpeado y torturado, forzado a realizar un video en el que se le obligaba a declarar falsamente que había recibido dinero para participar en las protestas.
«Lo tenían allí, torturándolo, pegándole para que hiciera un video donde decía que María Corina Machado le había pagado 30 dólares», afirmó Molina entre lágrimas, quien denunció que su hijo pasó semanas con dolores de cabeza y fiebre debido a las agresiones.
Por su parte, Patricia Rivas, madre de Cristian Pérez, también compartió su historia. Cristian, un joven músico, fue detenido sin haber estado involucrado en las manifestaciones. Según su madre, fue obligado a grabar un video bajo amenazas de muerte. «Mi hijo me dijo: ‘O hacía el video o me partían la cabeza'», narró Rivas, describiendo cómo los funcionarios amenazaron a su hijo con un trato aún más brutal si no cooperaba.
Asimismo destacó que a su hijo «le quemaron las tetillas».
Las madres exigen justicia y la liberación de sus hijos, quienes siguen detenidos bajo condiciones inhumanas, víctimas de una maquinaria represiva que busca callar las voces disidentes en Venezuela.