Adicionalmente la comisión se reunió con funcionarios del régimen, la Conferencia Episcopal Venezolana, la sociedad civil y el sector privado.
En el comunicado también se indica que la política de la UE con respecto a Venezuela “no ha cambiado: actualmente no existen las condiciones para que se lleve a cabo un proceso electoral libre, justo y democrático. Se discutió la posibilidad de posponer las elecciones legislativas para abrir un espacio de diálogo y cambiar esas condiciones. Sin un aplazamiento y una mejora de las condiciones democráticas y electorales, la UE no puede plantearse el envío de una misión de observación electoral”.
La misión de la Unión Europea no solo solicitó a Maduro el aplazamiento de la elección. La estrategia que habían planteado consistía en utilizar el tiempo del aplazamiento para lograr, al menos, ocho condiciones básicas para una elección:
- Observación internacional cualificada, lo cual supone postergar la elección para que pueda dar tiempo de organizarse.
- Solución al secuestro de los partidos.
- Acceso equilibrado a medios y garantía de cumplimiento. Adicionalmente el cese del uso de medios públicos como aparato de propaganda del gobierno
- Auditoría a fondo del nuevo sistema automatizado de votación
- Suspensión de inhabilitaciones.
- Suspensión de puntos rojos.
- Suspensión de la Asamblea Nacional Constituyente, sin modificación de la CRBV.
- Actualización del Registro Electoral
Por otra parte, el grupo encabezado por Henrique Capriles Radonski y el diputado Stalin González volvieron a exigir la suspensión del proceso del 6 de diciembre, al tiempo que retiraron a los 277 candidatos que habían inscrito preliminarmente para este proceso mientras negociaban condiciones para participar en los comicios.
Según explicó el diputado Stalin González “esta lucha es para lograr que los venezolanos podamos escoger nuestro futuro en paz, a través de la herramienta más poderosa que tenemos: el voto (…) A todos nos debe unir una causa: resolver la crisis en la que está sumergida Venezuela. Esto se logrará con un cambio verdadero y sostenible en el tiempo. Sólo así habremos ganado y recuperado el país”.
El actual diputado de el Asamblea Nacional, que mantiene su posición de no respaldar la continuidad del gobierno interino encabezado por Juan Guaidó a partir del 5 de enero de 2021 sostiene que “con absoluta responsabilidad decidimos explorar la participación el 6 de diciembre; con la intención firme y clara de dar pasos para promover un verdadero cambio político a través de la participación ciudadana y no ser parte de ninguna estrategia distinta a eso”.
Desde su perspectiva, se puede asegurar que se avanzó “en una difícil ruta, seguiremos luchando por ella. Uno de los logros es la libertad de algunos compañeros de lucha y otro es la visita de la UE al país. Lamentablemente, el régimen se niega a una elección que le sirva a los venezolanos”.
Sin condiciones
Luis Lander, director del Observatorio Electoral Venezolano (OEV), concuerda en que suspender la elección parlamentaria del 6 de diciembre de 2020, más allá del límite constitucional del 5 de enero de 2021 violaría los artículos 192 y 219 de la Carta Magna; sin embargo, recuerda que la convocatoria del proceso comicial desconoció también varios artículos constitucionales.
Según Lander, el escenario técnico y político de 2020 es muy similar al que se experimentó en el año 2000 cuando el gobierno de Hugo Chávez se negaba a posponer las elecciones generales de todos los cargos de elección popular del país que fueron convocadas para el 28 de mayo de ese año. No obstante, a pesar de la negativa del gobierno para suspender ese evento, el colapso técnico de la autoridad electoral no le dejó otra alternativa que reprogramar los comicios.
A los problemas técnicos y políticos, aún deben agregarse las dificultades sanitarias que atraviesa Venezuela a causa del COVID-19 y la ausencia de normas sanitarias específicas para evitar que el proceso comicial se convierta en un evento que aumente significativamente las tasas de contagios comunitarios del virus.
Mucho más que la postergación
El abogado y analista de procesos políticos Mariano de Alba explica que “la condición para el eventual envío de una misión de observación electoral a las parlamentarias por parte de la Unión Europea no es únicamente la postergación, sino la negociación e implementación previa de condiciones electorales básicas”.
Según De Alba “la diferencia es importante porque se intenta vender la idea que la propuesta de la Unión Europea era sólo pedir postergar a cambio de la misión de observación, lo que obviamente sería una locura”.
Fuente: Diario las Américas