CIUDAD DE MÉXICO.- Xóchitl Gálvez, la candidata de la oposición en las elecciones presidenciales mexicanas, anunció su intención de impugnar los resultados, alegando la presencia del crimen organizado durante el proceso electoral. La victoria fue otorgada a su rival, Claudia Sheinbaum, con una amplia diferencia de aproximadamente 30 puntos porcentuales.
«Reconocí mi derrota ayer porque soy una firme defensora de la democracia y confío en las instituciones. Sin embargo, los resultados inesperados nos obligan a examinar más de cerca lo sucedido», expresó Gálvez.
La candidata subrayó que su campaña enfrentó una desventaja significativa debido al apoyo del Estado a su contrincante, a lo que se sumó la presencia del crimen organizado, que, según afirmó, amenazó e incluso asesinó a varios candidatos durante la contienda electoral.
«No podemos permitir que futuras elecciones se vean empañadas por irregularidades similares. Debemos unirnos en defensa de nuestros principios democráticos», destacó Gálvez.
Aunque inicialmente Gálvez había proclamado su victoria y exigido el respeto al voto popular, la presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei, anunció que Sheinbaum había obtenido entre el 58,3% y el 60,7% de los votos, mientras que Gálvez se ubicó entre el 26,6% y el 28,6%, según el conteo rápido realizado por el organismo. Jorge Álvarez Máynez ocupó el tercer lugar con entre el 9,9% y el 10,8% de los votos.
Estas elecciones, las más grandes en la historia de México, contaron con la participación de más de 99,5 millones de ciudadanos y estuvieron marcadas por la violencia, con la muerte de aproximadamente una treintena de candidatos. Con más de 20.000 cargos en juego, incluida la composición del nuevo Congreso, la contienda electoral ha generado un intenso debate sobre la integridad del proceso democrático en el país.