CIUDAD DE MÉXICO. El proyecto Tren Maya, anunciado como un símbolo de progreso y desarrollo para el sureste mexicano, se ha visto envuelto en una ola de controversia y señalamientos de corrupción, por el presunto otorgamiento de contratos fraudulentos a personas muy cercanas a la familia presidencial.
Las revelaciones de audios filtrados, en los que se escuchan conversaciones entre primos y un amigo de los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), intensificaron las sospechas de lo que parece ser un caso de nepotismo y favoritismo en la asignación de contratos.
En ese sentido, el expresidente Felipe Calderón, a través de su cuenta de la red social X, antes twitter, calificó de cinismo y descaro el hecho de que Pedro Salazar Beltrán y Amilcar Olán, primo y amigo de los hijos del presidente, formen parte de la red de corrupción de la actual administración y controlen millones de dólares en la construcción del Tren Maya.
Calderón se refirió a unos audios que fueron transmitidos en la plataforma digital Latinus, por el periodista Carlos Loret de Mola, sobre la asignación, desde el gobierno, de contratos fraudulentos para la construcción del tren.
Coincidió el exmandatario con los comentarios del periodista quien también calificó la maniobra de la familia presidencial de cinismo y descaro, comenzado con el “padrino”, en alusión al propio AMLO. “Encima de la corrupción de asignarse, sin concurso, contratos por miles de millones de dólares, corrompen a quien hace el control de calidad del material y se ríen”, reprobó Calderón.
Lo que revelan los audios
Pedro Salazar Beltrán, primo de Andy y de Bobby López Beltrán, ambos hijos de AMLO, y Amílcar Olán, amigo de los hermanos López Beltrán, pasó de ser un empresario discreto a un multimillonario beneficiado con contratos de medicinas, de la refinería de Dos Bocas y en la construcción del Tren Maya.
En los audios filtrados se escucha a los hermanos López Beltrán y a Amílcar Olán referirse a sí mismos como una «red de corrupción». Bromean sobre la posibilidad de que el Tren Maya se descarrile debido a la mala calidad de los materiales que ellos mismos proveen, sin mostrar preocupación por las graves consecuencias que esto podría tener.
Tráfico de influencia y Sobornos
A los constructores del Tren Maya se les ordenó comprar la piedra balasto, base de las vías férreas, a Amílcar Olán. Esta orden, presuntamente proveniente del Palacio Nacional.
Además, Amílcar Olán, junto a los hermanos Pedro y Osterlen Salazar Beltrán, primos de los hijos del presidente AMLO, habrían sobornado al laboratorio responsable de avalar la calidad del balasto.
El periodista Loret de Mola señaló que la actitud, que calificó de «burlona y descarada» de estos personajes «se explica por la protección que reciben del gobierno mexicano. Sus acciones, avaladas por el Presidente, escapan a cualquier investigación a pesar de las pruebas existentes», señaló el comunicador.
Grabaciones y documentos revelan cómo se manipulan los contratos en el gobierno, sin que se anuncie ninguna investigación oficial. “Su única respuesta es una metralla incesante de calumnias y persecuciones contra quienes ventilamos los casos de corrupción que tienen infectado al gobierno y a la familia presidencial”, indicó el periodista.
Proyecto Tren Maya
El Tren Maya es un proyecto integral de transporte ferroviario de 1,500 kilómetros en el sureste mexicano, pasará por los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Está pensado para ofrecer un servicio de transporte para las personas que viven y trabajan en la región. Se planea que brinde a los visitantes conocer los principales atractivos turísticos del sureste de México, además debe servir para transportar productos agrícolas, industriales y otros bienes de consumo.
Se divide en siete tramos: Palenque – Escárcega (228 km), Escárcega – Calkiní (235 km), Calkiní – Izamal (172 km), Izamal – Cancún (257 km) Cancún – Tulum (122 km), Tulum – Bacalar (287 km), Bacalar – Chetumal – Escárcega (259 km).
La construcción del Tren Maya comenzó en 2019 e inició operaciones parcialmente en diciembre de 2023, con los tramos 1, 2, 3 y 4 en funcionamiento. Se espera que los tramos 5, 6 y 7 se completen en 2024.
El Tren Maya se promociona como una atracción turística de clase mundial que conectará sitios arqueológicos, reservas naturales y comunidades locales.