Nicaragua fue ubicada en la antepenúltima posición de América Latina y el Caribe, 31 de 33 países, solo por delante de las Islas Caimán y a Haití. A escala global, Nicaragua ocupó la posición 125, es decir, que quedó a 16 posiciones del final de la lista de 141 naciones, siendo catalogado como un país de alto riesgo para estas prácticas ilícitas.
Delante de estas naciones sólo se encuentran economías tan conflictivas o paraísos fiscales como Afganistán, Myanmar, Laos, Mozambique, Islas Caimán, Sierra Leona, Kenia, Nigeria, Yemen, Camboya y Angola.
El economista y exgerente regional del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), Roger Arteaga, dijo a la Voz de América que este es otro duro golpe para la imagen internacional de Nicaragua.
«Ningún país estaría anuente a ayudar a un país donde se pueda estar promoviendo el terrorismo que nadie lo quiere. Esto va a hacer que Nicaragua sea mal vista y no sea considerada un buen sujeto de crédito. Además, puede traer mas sanciones para el gobierno de Nicaragua, ni Estados Unidos ni Europa van a permitir que un país este promoviendo el narcotráfico y el terrorismo», señaló Arteaga.
Los autores del índice detallan que la economía nicaragüense obtuvo 6,78 de una puntuación de 10, donde 10 refleja una mayor exposición al lavado de dinero e indica lo que está haciendo una nación para combatir estas actividades.
El analista político y experto en temas económicos, Enrique Sáenz, dijo a la Voz de América que “esto aumenta el riesgo país y en consecuencia ahuyenta a potenciales inversionistas y encarece las transacciones financieras de agentes económicos nicaragüenses con agentes económicos en el exterior, dificulta o encarece la obtención de capitales”.
Mientras Estados Unidos ha señalado explícitamente a varios hijos del presidente Daniel Ortega por estar involucrados en actos de lavado de dinero, así como a altos funcionarios de su gobierno.
Además, la Unión Europea lo incluyó en la lista negra de países con los que las instituciones financieras europeas deben tener cuidado al momento de establecer relaciones financieras.
Sáenz advierte que mientras el presidente Ortega continúe al frente del país la realidad económica de Nicaragua no va a cambiar. “Mientras Ortega permanece aferrado al poder, tristemente, lamentablemente la economía del país no tiene cómo ver el sol claro, ni crecimiento económico, ni mejora de los ingresos, ni alivio de la pobreza, ni prosperidad económica”.
Las puntuaciones de riesgo presentadas en el Índice de Basilea están basadas en datos de 16 fuentes de acceso público como el Grupo de Acción Financiera Internacional, Transparencia Internacional, el Banco Mundial y el Foro Económico Mundial.
Esas puntuaciones abarcan cinco ámbitos: calidad del marco de prevención del lavado de activos y financiamiento del terrorismo; soborno y corrupción; transparencia y normas financieras; transparencia pública y rendición de cuentas; y riesgos legales y políticos.
Fuente: Voa Noticias