La composición del nuevo Congreso colombiano anuncia para los próximos cuatro años intensos debates y una dura polarización ante el enfrentamiento inevitable que se avecina entre el Legislativo y el Ejecutivo. Si bien las elecciones de este domingo ilusionan a una extrema izquierda que irrumpe tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes con una cantidad de curules que nunca había tenido, la coalición de partidos de centroderecha mantiene por estrecho margen el dominio al menos en la Cámara alta. Asimismo, las consultas interpartidistas permitieron despejar el panorama de cara a las presidenciales. Pero gane quien gane, el próximo presidente tendrá que negociar con sus adversarios para que sus proyectos vean luz.
En cuanto a número de votos, el Pacto Histórico, de Gustavo Petro, se posicionó en primer lugar en ambas cámaras, según el resultado oficial divulgado por la Registraduría. Sin embargo, esto no se traduce de igual manera en cuanto a curules. En el Senado comparte la primera posición con el Partido Conservador al obtener 16 escaños cada uno. En la Cámara baja la distribución de la representación favoreció al Partido Liberal, que obtuvo 32 puestos, frente a 25 de la coalición izquierdista.
Las alianzas serán vitales a la hora de gobernar. Por ello, sacando sus cuentas en caso de llegar a la Casa de Nariño, Petro ya adelantó este domingo la posibilidad de conformar un “Frente Amplío Democrático”, con el que aspira a alcanzar la “mayoría absoluta del Congreso”.
En manos de los liberales
Sumando en la Cámara de Representantes los asientos de las fuerzas políticas que han hecho oposición al gobierno del presidente Iván Duque, podría hablarse de unos 81 escaños en el nuevo Congreso colombiano. Petro podría estar contando además las 16 “curules de paz” para víctimas del conflicto armado que se incorporan ahora al Legislativo. Pero nada está dicho. Para empezar, el Pacto Histórico debería convencer al Partido Liberal de unirse a su bloque parlamentario. Petro ha mostrado estar muy interesado. Con el resultado de este domingo, los liberales se posicionan como el partido que podría decidir el futuro de Colombia.
A comienzos de marzo, el expresidente César Gaviria, jefe del Partido Liberal, sostuvo una reunión con Gustavo Petro que dio mucho de qué hablar. El ahora consolidado candidato del Pacto Histórico busca a toda costa el apoyo de los liberales, pero esto continúa en suspenso. El diario El Tiempo publicó para el momento del encuentro, citando fuentes cercanas al expresidente, que la cita se dio debido a la insistencia de Petro, y Gaviria aceptó reunirse con él de la misma manera como recibió a otros aspirantes como Alejandro Char y Alejandro Gaviria.
La relación de Petro con los liberales no ha sido la mejor. Pero no sería la primera vez que en política se hacen a un lado las diferencias por conveniencia. Falta ver si el exmandatario colombiano olvidó cuando en diciembre de 2019 Petro lo increpó desde su cuenta de Twitter al asegurar que “el Partido Liberal se ha convertido en un saloncito de té de la casa de César Gaviria”. Además cuestionó –según sus palabras– que “impone a su hijo, vinculado a Odebrecht, como su candidato presidencial”.
En el Senado la historia es otra. Incluso si la coalición de Petro consiguiera sumar al Partido Liberal y al Partido Verde solo llegaría 45 curules. Las organizaciones políticas de centroderecha tienen entre todas 55 escaños. Estos son el Partido Conservador (16), el Centro Democrático (14), Cambio Radical (11), el Partido de la U (10) y la coalición Mira – Colombia Justa Libre (4). De estos solo el Partido Conservador obtuvo un resultado positivo al sumar dos senadores en el nuevo Congreso colombiano con relación al actual. El Centro Democrático perdió cinco escaños, Cambio Radical perdió cuatro, el partido de la U perdió dos, al igual que la coalición Mira – Colombia Justa Libre.
Comienza la batalla por la presidencia
En lo que respecta a las consultas interpartidistas no hubo mayores sorpresas. Gustavo Petro ganó la consulta del Pacto Histórico, la coalición de extrema izquierda. La candidatura del Equipo por Colombia (centroderecha) quedó en manos del exalcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, quien consiguió un apoyo mucho mayor al que proyectaban las encuestas. Y la centroizquierda, agrupada en la alianza Centro Esperanza, eligió como su abanderado al también exalcalde de Medellín y excandidato presidencial, Sergio Fajardo, pero sin convencer, ya que en esta consulta la participación fue inferior a 6 %, mientras en la correspondiente al Equipo por Colombia se ubicó en 10,67 % y en la del Pacto Histórico llegó a 14,95 %.
Estos tres candidatos enfrentarán a otros aspirantes que avanzan en la carrera por la presidencia fuera de las alianzas como Óscar Iván Zuluaga, del Centro Democrático, y el exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández.
La participación general en los comicios de este domingo para escoger el nuevo Congreso colombiano se ubicó en torno a 47 %, una cifra ligeramente menor a la registrada en las elecciones legislativas de 2018, cuando acudieron a las urnas cerca de 49 % de los colombianos habilitados para sufragar.
Fuente: PanamPost