La tragedia ambiental continúa. Los frágiles ecosistemas del Parque Nacional Morrocoy, en Falcón, están bajo amenaza otra vez ante un nuevo derrame petrolero posiblemente procedente de la Refinería El Palito (REP), en Carabobo, alertó este martes 24 de noviembre la Sociedad Venezolana de Ecología (SVE).
“Desde la SVE denunciamos un nuevo derrame petrolero que impacta al Parque Nacional Morrocoy. El posible origen es nuevamente la refinería de El Palito”, señaló la organización mediante su cuenta en Instagram. “Exhortamos a Pdvsa a tomar las medidas de contención necesarias en las adyacencias de la refinería, para evitar más daños a la biodiversidad en Morrocoy”.
El director del Laboratorio de Sensores Remotos de la Universidad Simón Bolívar (USB), Eduardo Klein, publicó dos fotografías satelitales que evidencian este nuevo derrame que al parecer tiene como origen la REP. Sería el cuarto registrado en sus instalaciones durante los últimos cinco meses. Le preceden los ocurridos el 21 de julio, el 8 de agosto y el 13 de octubre.
En la primera imagen difundida por el también biólogo, correspondiente al 16 noviembre, aparece una gran mancha de hidrocarburo justo frente a la refinería carabobeña; mientras que en la segunda, del 22 de noviembre, se observan al menos cuatro manchas que se mueven hacia el noreste, camino al Golfo Triste y al Parque Nacional Morrocoy.
La SVE llamó a las autoridades ambientales a apoyar y fortalecer las iniciativas que han tenido los pobladores de las comunidades afectadas en Falcón, quiénes se han movilizado ante la contingencia. “Es necesaria la dotación de equipamiento, aunado al acompañamiento de expertos que hagan un diagnóstico y evaluación de las zonas afectadas”.
En el comunicado la organización también invitó a todos los investigadores, universitarios, ONG, medios de comunicación y comunidad en general a pronunciarse en contra de estos eventos “que constituyen una amenaza a nuestras playas y a nuestros ecosistemas marino costeros, que son parte fundamental de nuestra idiosincrasia como venezolanos”.
No es la primera vez que las costas falconianas resultan afectadas por una fuga de petróleo de la REP. El derrame de 21 de julio, casi tan grande como el Lago de Valencia según datos de Klein, impactó en mayor nivel los bosques de manglar de Morrocoy, así como también la fauna bentónica, que son las quiguas, los caracoles y las ostras de manglar, las últimas altamente consumidas por los turistas que visitan los cayos.
La costa carabobeña también sufre los embates de la maltrecha refinería. Los continuos derrames han afectado considerablemente la pesca artesanal de orilla en la playa El Palito, uno de los principales sustentos de los habitantes de la zona. Además, los comerciantes y prestadores de servicios están preocupados ante la falta de saneamiento del balneario, en el que se pueden observar restos de hidrocarburo y otros derivados.
La diputada María Gabriela Hernández, presidenta la Comisión de Ambiente de la Asamblea Nacional, visitó la playa El Palito el mes pasado para constatar la situación. Informó que tras realizar un recorrido y conversar con los habitantes de la zona, se encontró con que las manchas de hidrocarburo, cuyo origen probablemente sea la laguna de oxidación, continúan llegando al balneario cercano a la refinería.
Con niveles mínimos de producción de petróleo y combustible, hoy Pdvsa representa una gran paradoja: contamina más de lo que produce. Las refinerías de Puerto La Cruz, El Palito, Amuay y Cardón están paralizadas o parcialmente operativas.
Mientras, la estatal petrolera, el Ministerio de Ecosocialismo y el resto de las instituciones del gobierno de Nicolás Maduro permanecen en silencio.
Fuente: El Carabobeño