Que un joven inexperto de 20 años haya “burlado” la seguridad del Servicio Secreto de un expresidente de Estados Unidos y candidato presidencial; y haya disparado ocho veces desde un techo a 130 metros de distancia contra Donald J. Trump, no sólo tiene alarmados a millones de estadounidenses sino a varias comisiones de investigación en el Congreso.
A 17 días del atentado, los cuestionamientos aumentaron en dos comisiones investigadoras del Senado en Washington. Pero ahora existen más dudas que antes.
El director interino del Servicio Secreto, Ronald Rowe y el subdirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI), Paul Abbate, declararon el 30 de julio bajo juramento ante dos comisiones del Senado en Washington.
Las graves y múltiples fallas de seguridad propiciaron que los senadores en su mayoría acribillaran a preguntas a ambos funcionarios sobre las responsabilidades que permitieron que Trump fuera alcanzado por una bala en su oreja derecha, gracias a un ligero movimiento oportuno de su cabeza. De lo contrario, el proyectil hubiera impactado su cerebro.
Lo insólito
Ahora el Servicio Secreto parece dirigir sus declaraciones hacia problemas de comunicación y relaciones de operatividad con las autoridades locales, a pesar de que el propio Rowe dijo que “era una vergüenza lo que había visto en el lugar donde ocurrió el intento de asesinato a Trump el 13 de julio”, la muerte en el lugar de un asistente al evento de campaña y otras dos personas que resultaron gravemente heridas.
El propio Rowe se pregunta «por qué no había nadie en el techo desde donde el atacante, identificado como Thomas Mattew Crooks, abrió fuego». En la audiencia se supo que había dos agentes asignados al techo del edificio, pero dejaron su posición y en el momento del asalto se encontraban en el interior del inmueble.
Rowe afirma que trata de averiguar por qué estos agentes estaban dentro del edificio y no en el techo como se les había ordenado, según sus propias declaraciones y ante las preguntas con información previa de varios senadores.
Entre todo lo insólito de ese día sobre seguridad destaca que el individuo fue fotografiado seis veces 90 minutos antes del ataque y en días anteriores realizó labores de reconocimiento en el lugar.
El FBI confirmó que la policía local hizo una descripción detallada de Crooks como sospechoso que adjuntó a las fotos. La información fue enviada al comando del Servicio Secreto, de acuerdo con testimonios de la Policía de Butler.
El director interino señala ahora que esa información se quedó atascada en los canales de información y nunca llegó al Servicio Secreto, algo difícil de creer junto a muchos elementos evidentes que supuestamente pasaron sin la acción de una de las mejores fuerzas élites de seguridad en el mundo.
Los agentes del Servicio Secreto son entrenados para detectar el más mínimo indicio de peligro y neutralizarlo en cuestiones de minutos o segundos. Por eso, los legisladores tampoco entienden que procedimientos básicos y alertas hayan sido violados, a pesar de otras fallas en las políticas de protocolo de la agencia federal.
Comunicación y recursos denegados
Llama la atención cómo un coronel de la Policía de Butler, Pennsylvania, en una sesión anterior del Senado reveló problemas de banda ancha.
De acuerdo también con Rowe, hubo problemas con los radios, las comunicaciones y los sistemas para volar los drones. La información sobre el sospechoso se envió por mensaje de texto ¿Una casualidad o un hecho intencional?
El senador republicano por Texas John Cornyn preguntó al director del Servicio Secreto «por qué el drone del atacante funcionó, mientras que ustedes tuvieron problemas con el ancho de banda. El drone del atacante pudo operar, pero el del Servicio Secreto NO» ¿Cómo se puede entender esto?
«No tengo una explicación para eso, señor», respondio Rowe.
El director del Servicio Secreto no pudo explicar cómo el atacante voló su drone a las 3:51 de la tarde de ese día y la agencia que representa tenía los suyos desactivados hasta pasadas las 5:00 de la tarde, que después de esa hora tampoco se activaron.
El atacante comenzó a disparar a las 6:11 de la tarde y 25 segundos. Y el sistema de comunicaciones en el lugar entre las autoridades locales, estatales y federales estaba caído. Demasiada casualidad a este nivel de seguridad.
Pero además, las autoridades locales le ofrecieron al Servicio Secreto drones y fueron rechazados, se conoció en la audiencia del Senado.
Lo mismo sucedió con las solicitudes de aumento de recursos por parte de los escoltas del expresidente Trump y su campaña electoral.
Las dudas y sospechas respecto a un posible complot se multiplican a medida que avanzan las pesquisas. Las nuevas revelaciones convierten el caso en espeluznante.
Algunas teorías, calificadas por la izquierda de conspiradoras, se refieren a un supuesto complot para asesinar a Trump como una última opción para eiminarlo del camino hacia la Casa Blanca.
No es la primera vez que Trump es una diana. Semanas después de dejar la Presidencia, la ventana de su dormitorio en Mar-a-Lago detuvo la trayectoria de una bala de alto calibre, que también iba directo a su cabeza. Nunca más se habló del tema en ninguna parte y algunos medios conservadores dieron la noticia, pero no hubo seguimiento.
Durante la audiencia, ante dos comisiones del Senado, el republicano Rand Paul introdujo la sesión de la siguiente manera:
¿Responsables?
“Las vidas del personal de seguridad y de los asistentes al mitin de campaña han sido impactadas para siempre, pero los medios liberales han pasado -sin ninguna vergüenza- a otras historias y noticias”.
“Google ha tratado de suprimir las imágenes de Trump ensangrentado después del ataque, pero el pueblo estadounidense no ha olvidado y no vamos a olvidar. No hay duda de que esta fue una falla monumenta» del Servicio Secreto”.
“Lo que no está claro es quién o quiénes fueron las personas directamente responsables y cómo podemos asegurarnos de que esto no vuelva a ocurrir. El país merece saber que los responsables por este grave suceso no sigan a cargo de la seguridad de los líderes y funcionarios del país”.
“Mi equipo investigador viajó a Pennsylvania para hablar con autoridades policiales locales y documentar la tragedia. Algo preocupante me dijeron: A dos semanas del atentado nadie del Servicio Secreto había hablado con ellos. No sé cómo se puede llevar a cabo una investigación sin dialogar con entidades y funcionarios a cargo de hacer el trabajo en el terreno”.
“Hay muchas interrogantes abiertas sobre la planificación y el desempeño de la seguridad en este evento del 13 de julio. Aunque múltiples errores condujeron a este desastre, sabemos que las autoridades locales tenían sospecha 90 minutos antes del ataque”.
“Hay dos asuntos importantes que tenemos que abordar. Primero, por qué este techo quedó sin vigilancia, por qué se permitió que esto quedara fuera del perímetro de seguridad. La Policía local dijo que se refirió a la vulnerabilidad de este edificio y se lo manifestaron al Servicio Secreto y les dijeron que era un asunto que iban a atender. Evidentemente esta vulnerabilidad no se atendió”.
“Segundo: ¿Por qué se le permitió a Trump que subiera a la tarima? y ¿por qué no lo retiraron cuando sabían que un individuo sospechoso estaba en actividades cada vez más sospechosas en el lugar?”.
“Casi 20 minutos antes de que comenzara a hablar Trump, se le informó al Servicio Secreto sobre un individuo que tenía un telémetro, les entregaron fotografías y una descripción detallada de la persona. ¿Por qué no actuaron de inmediato?”
“Las entrevistas con la policía local muestran una realidad diferente a lo que nos ha dicho el Servicio Secreto en otras sesiones. Nuestras comisiones han solicitado hablar con agentes responsables ese día, pero la dirección del Servicio Secreto no nos ha permitido todavía hablar con ellos”.
El director del Servicio Secreto, Ronald Rowe, ha sido director adjunto y tiene una carrera de 25 años en este departamento federal, ha coordinado diversas operaciones de seguridad y ha colaborado con otras entidades gubernamentales y policiales y fue parte de la Oficina de asuntos intergubernamentales y legislativos, de acuerdo con la presentación ante los miembros de ambas comisiones en el Senado federal.
“El intento de asesinato del presidente Donald J. Trump el 13 de julio de 2024 en Butler, Pennsylvania, fue una falla a múltiples niveles. Yo me uno al Congreso y a todos los estadounidenses en condenar este terrible ataque contra el expresidente Trump, Cory Comperatore, y las otras dos víctimas”, aceptó Rowe.
“Hay múltiples investigaciones en marcha sobre el ataque y los errores de seguridad ese día. Yo he tomado medidas urgentes para evitar que esos errores no se repitan. Desde que fui designado como director interino he detectado fallas graves el 13 de julio y he tomado medidas correctivas”.
La afirmación fue refutada por varios senadores entre ellos, Josh Hawley, Ted Cruz y Lindsey Graham.
Ningún responsable ha sido suspendido ni despedido después de casi un mes del atentado.
Sobre la pregunta de si Crooks pudo ser detectado días anteriores al ataque, el subdirector del FBI dijo que “el atacante no interactuó con la policía ni usó medios que llamaran la atención. No se ha encontrado nada que hubiera alertado a la policía, al FBI o al Servicio Secreto sobre sus intenciones”.
“Tuvimos una reunión entre el Servicio Secreto y el FBI en los días previos al evento para determinar y evaluar si había alguna información de inteligencia pertinente o amenazas contra el evento, el expresidente Trump o alguna otra persona”, contó.
En la audiencia, un miembro de una de las comisiones indicó que “el Servicio Secreto tenía un operador de recursos aéreos ese día. El sistema debió entrar en operación a las 3:00 de la tarde, sin embargo, lo que nos ha dicho el Servicio Secreto es que debido a problemas de ancho de banda celular el sistema no se pudo utilizar hasta las 5:20 de la tarde”.
Cronología del atacante, según el FBI
De acuerdo con el informe del FBI ante los senadores, el asesino disparó su fusil AR-15 a las 6:11 y 25 segundos de la tarde. Lo cual señala que, con el sistema celular ya en funcionamiento, el Servicio Secreto no dispuso de ningún drone de vigilancia que hubiera detectado de inmediato al atacante al subir al edificio y posicionarse en el techo con el arma.
A continuación, el Informe del subdirector del FBI ante las dos comisión del senado, que incluye una cronología de lo que hizo el asesino ese día y el día anterior.
“La pesquisa sigue centrada en identificar motivos, identificar a conspiradores y otras personas que hayan sabido del ataque. Hasta ahora no se ha detectado a personas vinculadas con el ataque y que hayan tenido conocimiento previo del atentado”, dijo director adjunto del FBI Abbate.
“Mi equipo del FBI ha realizado más de 460 entrevistas, ha visitado la residencia del atacante, ha incautado medios electrónicos, se han iniciado procesos legales contra decenas de compañías y hemos recibido más de 2.000 pistas del público”.
“Este individuo averiguó la distancia que estaba Lee Harvey Oswald del presidente John F. Kennedy; visitó el lugar durante unos 20 minutos e hizo labores de reconocimiento días antes y el mismo día del ataque. El 12 viajó al club donde practicaba tiro. El 13 en la mañana, regresó al lugar de la concentración y se quedó allí por unos 70 minutos antes de volver a su casa”.
“A eso de la 1:30 de la tarde del 13 de julio, el padre del atacante le dio un rifle AR-15, porque tenía entendido de que iba al centro de prácticas de tiro. Unos 25 minutos después, el atacante compró municiones en camino al lugar del evento en Butler. Al llegar estuvo reconociendo el área cerca del edificio AGR, desde donde lanzó el ataque”.
“A las 3:51 de la tarde este sujeto utilizó un drone a unas 200 yardas del sitio del evento durante 11 minutos. El drone y el control fueron encontrados en el vehículo del sospechoso. El análisis no ha revelado fotografías tomadas con el drone, pero sí sabemos que transmitió esto en vivo y que podía ver las imágenes en la pantalla del control”.
“El primer avistamiento del atacante fue a las 4:26 de la tarde. A las 5:10 el individuo fue identificado nuevamente por las autoridades locales como un sujeto sospechoso cerca del edificio. A las 5:14 el equipo SWAT tomó una fotografía del atacante. A las 5:32 fue visto cerca del edificio utilizando un teléfono y el telémetro. A las 5:38, la foto que se había tomado previamente fue enviada a los equipos de SWAT en un mensaje de texto en grupo”.
“Unos 25 minutos antes del ataque, el puesto de comando del Servicio Secreto fue informado que había una persona sospechosa. Los agentes perdieron de vista al sujeto desde la 6:02 de la tarde hasta las 6:08, pero seguían comunicándose entre sí para ubicarlo”.
“Un nuevo video muestra al individuo subiendo al techo del edificio a las 6:06 de la tarde y dos minutos después fue observado en el techo por la policía local. A las 6:11 un agente local fue ayudado por un compañero a subir al techo. Vio al individuo y observó que estaba con un arma larga. Unos 30 segundos después el atacante abrió fuego”.
“El equipo de recuperación de evidencia halló 8 casquillos de bala en el lugar junto al cuerpo del atacante. Pensamos que hizo ocho disparos”.
¿Por qué no se detuvo el mitin?
El senador demócrata por Illinois Dick Durbin expuso en la audiencia del Capitolio:
El Congreso casi ha duplicado el presupuesto del Servicio Secreto en los últimos 10 años. De 1.800 millones de dólares a 3.000 millones de dólares en 2024. A pesar de este incremento en fondos, el número de agentes directos en operaciones de protección ha bajado de 4.027 a 3.671 durante el mismo período, una reducción de casi el 9%.
Rowe respondió que “sólo el 2% de los solicitantes pasa el proceso de contratación. Este es un trabajo difícil: se vive la vida de uno bajo el horario de otro, estamos constantemente lejos de la familia y respondemos a mayores demandas investigativas”.
“Creo que hay múltiples factores como la economía y otras oportunidades. Tenemos personas con mucha destreza en las nuevas tecnologías y son de alta demanda en el sector privado”.
El senador Paul interviene y afirma:
“Se ha hablado de los 90 minutos antes del sospechoso y otros errores por los que se debió detener el evento hasta que se aclarara el problema del sospechoso”.
Trump asiste a múltiples presentaciones en público de este tipo y hablamos de 90 minutos de un sospechoso, hay al menos seis fotografías del individuo y no se actúa ¿Con qué frecuencia ocurre esto?, porque es verdaderamente alarmante.
Respuesta de Rowe: “Pasaron 90 minutos desde que fue identificado por primera vez y tenemos una ventana de unos 30 minutos, pero en ningún momento se habló de arma”.
Senador Paul: “El asesino tenía además de un telémetro una mochila suficientemente grande para llevar un arma larga y con algo así no se le permite a una persona que se acerque a un perímetro de seguridad. ¿Por qué no ampliaron el perímetro? Nunca hubiera llegado hasta el edificio si al menos le hubieran revisado la mochila».
«Una persona con una mochila grande es muy sospechosa -aclara Paul- y ustedes escucharon sobre esto. Así que aquí hubo una falla masiva. Mi pregunta es y reitero, ¿Con cuánta frecuencia ocurre esto?
Respuesta de Rowe: Senador, en las concentraciones hay personas sospechosas por muchas razones.
Senador Paul: Para la persona o las personas a cargo este es un error garrafal. Pudieron haber parado el evento y revisar al sospechoso, pero NO se hizo.
El drone, un telémetro
El senador republicano por Texas John Cornyn preguntó al director del Servicio Secreto “por qué el drone del atacante funcionó, mientras que ustedes tuvieron problemas con el ancho de banda. El drone del atacante pudo operar, pero el del Servicio Secreto No”.
Respuesta de Rowe: “No tengo una explicación para eso, señor”.
Senador Cornyn: “En este caso el atacante tenía un rifle, pero pudo haber utilizado un drone”.
Respuesta de Rowe: “Tenemos la capacidad limitada para espacios temporales. En este caso el sistema tuvo fallas técnicas”.
Senador Cornyn: “Este individuo fue catalogado como una persona sospechosa. Puede explicarnos en qué momento un sospechoso se convierte en una amenaza”.
Respuesta de Rowe: En el momento en que sale a relucir un arma u otro elemento peligroso.
Senador Cornyn: ¿Un telémetro no convierte a alguien en una amenaza?
Respuesta Rowe: el Telémetro fue lo que llamó la atención de las autoridades locales. Al expresidente se le permitió subir a la tarima porque en ese momento el sospechoso no estaba en el nivel de amenaza.
Senador Cornyn: ¿Siendo un cuerpo élite, por qué el Servicio Secreto delega en las autoridades locales?
Respuesta de Rowe: Nuevamente, aquí hubo una falla de no cuestionar lo que asumimos que ocurra. No quiero minimizar el compromiso de las autoridades locales. Ellos conocen mejor el terreno. Asumimos que había presencia uniformada en el lugar, que habría suficientes ojos para cubrir el evento, que había personal en el edificio. Le aseguro que no vamos a cometer ese error otra vez.
Sube de tono el interrogario al director interino del Servicio Secreto.
Los senadores republicanos Josh Hawley y Ted Cruz cuestionaron con severidad que el Servicio Secreto no tuviera un francotirador o agentes en el techo del edificio donde disparó el asesino y que los responsables no hayan sido aún suspendidos al menos durante la investigación. El director interino del Servicio Secreto, Ronald Rowe, se molestó con las preguntas.
Respuesta de Rowe: La función de los francotiradores es proteger al objetivo principal».
Senador Hawley: Pero el objetivo principal, señor Rowe, recibió un disparo, una persona murió y dos fueron gravemente heridos… Tienen obligatoriamente que revisar ese protocolo
Senador Hawley: ¿Quién fue el agente que tomó la decisión de dejar este edificio fuera del perímetro de seguridad?
Respuesta de Rowe: Senador, no le puedo dar nombre, se están haciendo investigaciones para determinar si fue una o varias personas.
Senador Hawley: ¿Ha sido suspendida esta persona? Yo sé el nombre por cierto. ¿Por qué no ha sido suspendido?
Respuesta de Rowe: Esta persona está cooperando, está siendo entrevistada por el FBI y por nuestra Oficina de Responsabilidad Profesional. Vamos a dejar que la investigación prosiga.
Senador Hawley: ¿No es cierto que un expresidente fue baleado, que un padre de familia fue asesinado y dos otros asistentes al mitin resultaron gravemente heridos? ¿No es eso suficiente eso para determinar que la persona responsable de dejar fuera este edifico del perímetro de seguridad sea destituido de inmediato, además de enfrentar otras consecuencias?
¿Qué tal la persona a cargo de la inter operatividad? ¿Esa persona ha sido suspendida?
Respuesta de Rowe: No señor, porque esta función va más allá de una persona.
Senador Hawley: La persona que permitió que el expresidente Trump saliera sabiendo que había problemas de seguridad. ¿Esa persona ha sido suspendida?
Respuesta de Rowe: No, señor.
Senador Hawley: ¿La persona que decidió no retirarlo de la tarima cuando conocía de una amenaza ha sido suspendida?
Respuesta de Rowe: No, señor. Me remito a mi respuesta original. Estamos investigando todo esto.
Senador Hawley: ¿Pero qué más necesitan para saber que aquí hubo fallas de tal magnitud que hay muchas personas involucradas y responsables?
Respuesta de Rowe: Necesito saber qué ocurrió y que los investigadores hagan su trabajo. Yo llevo 17 días sin dormir por esta situación y no voy a precipitar las decisiones. Los responsables serán sancionados, pero lo haré con integridad.
Senador Hawley: ¿Lo que ocurrió ese día no fue una violación de todos los protocolos de seguridad?
Respuesta de Rowe: En eso estamos de acuerdo.
Senador Hawley: Tengo información de un denunciante de que usted personalmente tuvo que ver con el rechazo de diversas solicitudes de incremento de seguridad al expresidente Trump.
Respuesta de Rowe: Eso no es verdad, y yo no tuve nada que ver con eso.
Un denunciante me dice que había personal del Servicio Secreto designado para estar en ese techo y que ellos abandonaron la posición porque había mucho calor. ¿Es eso cierto? Eso me dijo un denunciante, puede que no sea cierto.
Respuesta de Rowe: Yo he escuchado eso también, senador. Nuevamente le digo que estaban dentro del edificio. No sé si había alguien asignado allí. Estamos analizando esto. Tenía que haber alguien en ese techo y el hecho de que estuvieran en el interior es algo que tratamos de esclarecer.
Senador Hawley: Me siento muy frustrado, director, de que a 17 días después del intento de asesinato al presidente 45 de Estados Unidos los denunciantes no coinciden con lo usted ha declararado aquí.
Respuesta de Rowe: Senador, yo he sido muy transparente.
Senador Hawley: Su agencia no lo ha sido.
Respuesta: Por favor, no caigamos en esto. Yo he sido muy franco.
Senador Hawley: Eso está por ver. Usted lleva sólo unos días en el cargo.
Rechazo a solicitudes de recursos adicionales para proteger a Trump
El senador republicano por Texas Ted Cruz interviene en la audiencia y manifiesta que «el liderazgo del Servicio Secreto cometió fallas catastróficas, las peores desde 1981 cuando el intento de asesinato al presidente Ronald Reagan».
Un portavoz del Servicio Secreto dijo que era falso que los escoltas del expresidente Donald J. Trump hubieran solicitado recursos adicionales para su seguridad y que se les había rechazado.
Esta persona mintió a nombre del Servicio Secreto y tampoco ha sido despedida. ¿Usted aprobó esta declaración?
Respuesta de Rowe: No señor. Yo no recuerdo haber aprobado esa declaración. Esto es un proceso. La escolta hace la solicitud a la oficina de campo con recursos técnicos, pasa a la oficina de logística…
Senador Cruz: Es decir, aquí hay una gran burocracia. Déjeme decirle lo que creo. Considero que el liderazgo del Servicio Secreto tomó una decisión política de negarle mayor protección al expresidente y denegar esas solicitudes. Y creo que el gobierno de Joe Biden ha estado impregnado de política partidista.
La misma persona que negó estas solicitudes a Trump negó también recursos de protección a Robert Kennedy Jr., cuyo padre fue asesinado y cuyo tío fue asesinado también.
Respuesta de Rowe: Le puedo decir que el Servicio Secreto no es una entidad política.
Senador Cruz: Usted no desea responder mi pregunta. Pero le aclaro algo, la designación de su cargo por parte del presidente de EEUU es una decisión política. Y respecto a la protección del expresidente Trump, ha influido bastante con una incongruente postura política.