Según Guterres, el impacto de la pandemia del nuevo coronavirus «ampliará significativamente la brecha de financiamiento» de América Latina y el Caribe, lo que podría llegar a generar «una gran crisis de liquidez», es decir, falta de dinero para que la economía camine a su ritmo habitual.
El secretario general de la ONU apeló al «apoyo» de entidades financieras multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), además de los países del Grupo de los Veinte (G20).
Una de las medidas que Guterres pidió a estos organismos es que acepten retrasar el cobro de la deuda hasta finales de 2021.
Esa iniciativa tiene como principal objetivo «permitir a los países pobres concentrar sus recursos en combatir la pandemia y proteger las vidas y los medios de subsistencia de la población más vulnerable», según explica una reseña sobre la misma en la página en Internet del Banco Mundial.
El secretario general de la ONU también llamó al FMI, al BM y al G20 a brindar la posibilidad a los países de América Latina, incluyendo a los de ingresos medios, de «considerar la posibilidad de conceder un mayor alivio, incluidas las cancelaciones de deuda».
Fuente: Diario las Américas