Alguien dijo una vez «si le entregan el desierto del Sahara a los comunistas en poco tiempo habría escasez de arena». Y pensar que todavía existen personas completamente equivocadas pensando que en esos sistemas está la solución de sus problemas sociales y económicos.
He tenido el privilegio de viajar por muchísimos países y he podido comprobar la diferencia abismal que existe entre los países de uno u otro sistema. El sistema capitalista te permite desarrollar tus ideas, estimula tu iniciativa y remunera tus esfuerzos con creces. Está comprobado que la motivación del hombre en cualquiera que sea su trabajo dará al traste con un mejor rendimiento y efectividad en el desarrollo de sus funciones.
El sistema comunista aniquila la iniciativa y la motivación del individuo, por ende su rendimiento se verá afectado grandemente por el desinterés y la apatía.
Los seres humanos bajo el sistema comunista se convierten en marionetas controladas por el gobierno, perdiendo absolutamente su libertad, su integridad y su poder de decisión.
«Cuando un político de izquierda dice que acabará con la pobreza, se refiere a la suya».
Paulo Coelho.
«El socialismo es la filosofía del fracaso, el credo a la ignorancia, la prédica a la envidia, su virtud inherente es el reparto equitativo de la miseria».
Fuente: Diario las Américas