LIMA.- El presidente peruano Pedro Castillo, quien enfrenta un pedido de destitución, nombró el lunes como ministro de defensa a un militar jubilado que ejercía un cargo clave en la dirección de inteligencia.
Castillo juramentó a Gustavo Bobbio, general retirado del ejército y quien trabajaba como jefe de asesores de la dirección de inteligencia. Bobbio es el sexto ministro de defensa y reemplaza a Daniel Barragán, quien renunció el sábado “por motivos personales” y sin dar más detalles.
El cambio se produce dos días antes que el Parlamento de mayoría opositora debata un tercer intento de destitución presidencial por presunta “incapacidad moral permanente”, una causal incorporada hace más de 180 años en las leyes peruanas que no tiene una definición objetiva, según los expertos. En el siglo XIX significaba “locura”, pero ahora la relacionan con la corrupción.
No está claro si los legisladores lograrán juntar los 87 votos necesarios para destituir a Castillo. A inicios de 2022 y a fines de 2021 los legisladores fracasaron en remover al mandatario. Es la séptima vez que el Parlamento, desde 2017, ha usado la causal de “incapacidad moral permanente” para intentar remover presidentes, contribuyendo a una crisis política que no ha culminado.
Castillo es investigado de forma preliminar por la fiscalía por presunta corrupción. La fiscalía argumenta que el mandatario aprovecha su posición de poder para beneficiarse económicamente junto a un grupo de familiares, funcionarios y amigos. El presidente rechaza todas las acusaciones.
En Perú un presidente no puede ser juzgado durante su gobierno porque según la constitución eso sólo puede darse en caso de traición a la patria, disolución del Parlamento por casos diferentes a los permitidos, no convocar elecciones o impedir el funcionamiento del Congreso o de los organismos electorales.
Desde 2016 Perú ha tenido cinco mandatarios y tres Parlamentos, cuando por periodos normales hubiese correspondido dos presidentes y dos Congresos. En noviembre de 2020 el país tuvo tres mandatarios durante poco más de una semana entre confrontaciones que dejaron dos muertos y más de 200 heridos.