LA HABANA.- Por más de seis décadas el régimen de Cuba ha mantenido un sistema de distribución de productos básicos racionados entre la población, una medida instaurada por el fallecido dictador Fidel Castro en 1962 con el supuesto objetivo de evitar el acaparamiento y la especulación.
A pesar de este largo periodo de implementación, el economista Orlando Freire Santana, señaló que la persistencia de la libreta de racionamiento refleja el fracaso tanto económico como gubernamental en satisfacer las necesidades de la población cubana. Además, destacó que la situación se ha vuelto cada vez más difícil para los ciudadanos comunes.
El economista argumentó, según reseña Martí Noticias, que ni siquiera durante la época de la llamada «tubería soviética», cuando Cuba era parte del Consejo de Ayuda Mutua Económica y recibía grandes cantidades de petróleo, se pudo eliminar este sistema de racionamiento. Esta dependencia ha llevado a Cuba a ser altamente dependiente de la ayuda internacional, incluyendo la importación de productos por parte de Estados Unidos.
Aunque el régimen cubano insiste en que el embargo estadounidense es la principal causa de la crisis económica en la isla, las estadísticas muestran que Estados Unidos fue uno de los principales exportadores a Cuba en 2022. En tal sentido, Freire Santana señaló que la producción nacional enfrenta numerosos obstáculos, incluyendo problemas en las empresas estatales, falta de autonomía y falta de resultados en la inversión extranjera.
El economista también mencionó la pérdida de trabajadores en Cuba debido a la migración, lo que ha llevado al régimen cubano a realizar ofertas laborales y ferias de empleo sin obtener resultados significativos. Asimismo, señaló que la falta de incentivos para los agricultores y los problemas de pago han contribuido a la disminución de la producción agrícola y a un aumento de la inflación.