BOGOTÁ.- En los primeros 100 días de su inédito gobierno de izquierda, Colombia acordó el cese de hostilidades con al menos diez grupos ilegales, destacó este martes el presidente Gustavo Petro durante un balance de su gestión ante la prensa, lo que considera su «principal logro».
«Más de diez grupos al margen de la ley están en cese bilateral del fuego en este momento», dijo el mandatario desde la presidencial Casa de Nariño, sin ofrecer más detalles.
«Eso es lo que llamamos ‘paz total'», considera Petro en referencia a la política con la que pretende «negociar» el desarme de los alzados en armas a cambio de lo que llama beneficios legales, pero que sectores de la oposición definen como «impunidad».
Un proyecto de ley que lleva ese nombre está siendo debatido en el Congreso.
Petro no especificó cuáles son los grupos ilegales que según él suspendieron los ataques.
La guerrilla del ELN está a puertas de reanudar un supuesto proceso de paz luego más de tres años de interrupción bajo el anterior gobierno de Iván Duque como consecuencia de un ataque a una escuela militar que dejó 23 muertos.Petro ha anunciado con bombos y platillos las negociaciones con el ELN, pese a que siguen las actividades terroristas del grupo con el reciente secuestro de dos oficiales del ejército.
Sin revelar los nombres, Petro deslizó que ya definió a los delegados para sentarse en la mesa con el último grupo rebelde reconocido del país en sedes rotativas con la presencia de Cuba y Noruega, los países garantes.
Según el centro de estudios Indepaz, el Clan del Golfo, la mayor banda narco del país, y otras agrupaciones de origen paramilitar han declarado el «cese al fuego» desde la investidura de Petro, el 7 de agosto.
Esa ONG calcula que en Colombia operan por lo menos 90 grupos armados, que tienen en total unos 10.000 miembros.
Petro promete no buscar reelección
En su rendición de cuentas, Petro aseguró que no modificará la Constitución, que prohíbe la reelección, para mantenerse en el poder después de que finalice su mandato en 2026.
También presentó un listado de 50 medidas tomadas en torno a los dos pilares fundamentales de su gobierno: «justicia climática» para el cuidado del medio ambiente, en particular de la Amazonía; y «un bloque de políticas públicas que tienen que ver con la [defensa de la] vida humana», como poner fin a la violencia.
En ese sentido destacó la aprobación de una reforma tributaria que aumentó impuestos a los más ricos para financiar a costa de los que generan fuentes de empleo, los programas sociales y la compra de miles de hectáreas de tierras para entregar a comunidades negras, indígenas y campesinas.
Subrayó asimismo la reapertura de las relaciones diplomáticas y comerciales con Venezuela, que estaban rotas por las diferencias entre el dictador Nicolás Maduro y Duque, quien no reconocía como legítimo al régimen venezolano.