Importantes figuras del Partido Demócrata están pidiendo la renuncia de Andrew Cuomo por dos motivos: las denuncias de acoso sexual y por ocultar las muertes por COVID-19 en hogares de ancianos en Nueva York.
Poco a poco el gobernador queda entre la espada y la pared. Su expediente está quedando manchado con las acusaciones de siete mujeres que aseguran fueron abusadas, tocadas y acosadas. Pero una persona —quizás la más relevante del partido— ha evitado fijar una posición firme. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Inclusive legisladores del estado de Nueva York abrieron una investigación de juicio político contra el gobernador, que buscará entrevistar a testigos, citar documentos y evaluar pruebas. En lugar de eso, Biden ha optado por una posición moderada, que no respalda el pedido de renuncia de sus compañeros de partido.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que el presidente de EEUU considera «preocupantes» las acusaciones de acoso sexual contra Cuomo. Según EFE calificó de «apropiado» que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, iniciara una investigación independiente pero no se refirió al pedido de renuncia.
Hasta la presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, se pronunció sobre el tema. Exhortó a Cuomo a cuestionar cuán efectivo en su liderazgo bajo las circunstancias existentes.
Cuomo o Biden no solo comparten el mismo partido político. Ambos acumulan acusaciones de exempleadas o de mujeres jóvenes que coincidieron con ellos en algún evento o circunstancia. Todas ellas hablan de acosos físicos, otra similitud entre ambos.
Toqueteos y acosos
Hace poco se dieron a conocer las denuncias contra el gobernador de Nueva York, una de ellas viene de Anne Ruch. Contó que en 2019 coincidió con Cuomo en una boda y este le puso su mano en la parte baja de la espalda, al querer alejarse, el hombre de 63 años le agarró ambas mejillas y le preguntó: «¿Puedo besarte?».
Hay registros gráficos de lo que pasó. Lindsey Boylan y Charlotte Bennett también forman parte de las jóvenes que denunciaron las conductas inapropiadas. Boylan contó que el gobernador la besó en los labios sin permiso; la segunda denunciante dijo que el gobernador le preguntó si era monógama y si alguna vez había tenido relaciones con hombres mayores.
Sobre Biden pesan acusaciones parecidas. Caitlyn Caruso contó a New York Times que Biden le puso la mano en su muslo y la abrazó justo después que ella contara otra experiencia previa de acoso sexual durante un evento en la Universidad de Nevada, Las Vegas.
Vail Kohnert-Yount le dijo al Washington Post que cuando era pasante en la Casa Blanca en 2013, el entonces vicepresidente puso su mano en la parte de atrás de su cabeza y presionó su frente contra mi frente mientras le hablaba.
La expolítica de Nevada Lucy Flores escribió en The Cut que en 2014 Biden puso sus manos sobre sus hombros, olió su cabello y besó su nuca cuando los dos estaban en un evento de campaña.
Quizás el caso más lapidario contra Biden es el de Tara Reade, que lo señaló por haber abusado sexualmente de ella en los pasillos del Congreso en 1993.
La «defensa» de ambos
¿Qué han dicho ambos demócratas sobre las acusaciones de acoso sexual? Los argumentos son similares. El portal Fox News recuerda cómo Joe Biden se defendió en 2019 diciendo que «la política siempre ha consistido en hacer conexiones». Y que iba a ser «más consciente de respetar el espacio personal en el futuro».
“Esa es mi responsabilidad, creo. Le doy la mano, abrazo a la gente, agarro a hombres y mujeres por los hombros y les digo ‘ustedes pueden hacer esto’. Y ya sean mujeres, hombres, jóvenes, viejos, es la forma en que siempre he sido. Es la forma en que he tratado de demostrar que me preocupo por ellos y que los escucho», se escucha en el video que publicó en Twitter.
El argumento de Cuomo va por el mismo camino. «Entiendo que actué de una manera que hizo a la gente sentirse incómoda, no fue intencionado y franca y profundamente pido perdón por ello, me siento muy mal por eso (…) Pido perdón a las jóvenes mujeres que trabajaron aquí, que dicen que les hice sentirse incómodas», fueron sus palabra reseñadas por EFE.
El gobernador de Nueva York negó las acusaciones de Lindsey Boylan pero dirigió sus disculpas luego de darse a conocer los argumentos de Anne Ruch y Charlotte Bennett. A la vez mencionó algo similar a Biden. «Puedes encontrar cientos de fotos mías haciendo el mismo gesto con cientos de personas, mujeres, hombres, niños, etc.».
Lo que dice el partido
Puede que la leve diferencia entre ambos casos sea la reacción del Partido Demócrata. Kamala Harris abogó por las mujeres que revelaron los presuntos casos de acoso sexual de Joe Biden. «Yo les creo y las respeto por poder contar sus historias y por tener el coraje de hacerlo”, dijo cuando se dieron a conocer varias de las denuncias. Aunque luego se convirtió en compañera de fórmula de Biden.
Por su parte, Ilhan Omar, miembro del «escuadrón» demócrata dijo en una entrevista a The Sunday Times que creía en las acusaciones de Tara Reade pero que igual votaría por Biden para que le ganara a Trump.
Contra Cuomo la respuesta ha sido un poco más radical. Un grupo de 59 legisladores estatales demócratas emitió un comunicado pidiendo su renuncia, entre ellos el líder de la mayoría demócrata en el Senado de EE.UU., Chuck Schumer, y la senadora neoyorquina Kirsten Gilibran, indicó EFE.
La presión sobre el gobernador continúa sin que el presidente de Estados Unidos se una a las exigencias de su propio partido.
Fuente: PanamPost