Los dos principales
programas de bienestar social del gobierno estadounidense corren peligro debido a los cuantiosos desembolsos causados por la pandemia del coronavirus y por el retiro de la enorme generación de la posguerra.
La agencia que administra el
Seguro Social y el
Medicare reportó el martes que el Seguro Social podría quedar sin poder pagar a todos sus miembros para el año 2034, en vez de 2035 como preveía antes.
El pronóstico para el Medicare sigue igual: quedará sin fondos para 2026, igual que lo pronosticado el año pasado.
“Las finanzas de ambos programas han quedado sumamente afectadas por la pandemia del COVID-19 y por la recesión de 2020”, advirtió la agencia.
Fuente: Diario las Américas