Que las fuerzas de seguridad y la milicia del régimen hayan salido a las calles de Cuba para reprimir, no quiere decir que las movilizaciones hayan terminado. En las localidades de Guantánamo y Baracoa se registraron durante el fin de semana nuevas protestas de ciudadanos descontentos.
Las manifestaciones fueron más activas en Baracoa, donde se mantenía un fuerte despliegue policial, según un reporte de Cubanet. Al grito de «¡Queremos un cambio!» las personas salieron a las calles de acuerdo con videos publicados por algunos asistentes. El resultado fueron más detenidos, aunque se desconoce el número.
Niober García Fournier es corresponsal de dicho portal. Confirmó la presencia policial en Guantánamo, mientras que su casa amaneció custodiada por funcionarios. El periodista había sido detenido días antes y puesto en libertad. Le advirtieron que no debía participar en protestas contra el dictador Miguel Díaz-Canel, él estaba reportando desde Guantánamo.
Ciudades sitiadas
Ubicada a unos 30 kilómetros al oeste de La Habana, la ciudad de San Antonio de los Baños fue uno de los lugares donde se originaron las protestas. Los accesos para este domingo se encontraban en su mayoría cortados o custodiados por agentes de seguridad, indicó EFE.
Se veían camiones con soldados y una decena de policías, militares y agentes del Departamento de la Seguridad del Estado, había tomado la plaza central del pueblo. La localidad vecina de Bauta también tenía «un policía en cada esquina».
Por esa zona el servicio de internet está interrumpido y no hay respuesta oficial sobre cuándo será restaurado por parte de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba SA (ETECSA). Probablemente pasen varios días hasta que sea restituido. Tener conexión no solo implica el intercambio de mensajes, sino estar «conectados como una masa humana», de allí que los cubanos usen en las calles el lema «estamos conectados».
«Patria y vida»
Hay casi 500 detenidos registrados desde el inicio de las protestas el domingo 11 de julio. Algunos han sido liberados con las orden de no salir de sus casas y acusados de tener nexos con Estados Unidos o de ser «traidores a la patria», señalamientos repetitivos emitidos desde el régimen para arremeter contra disidentes.
Un episodio ocurrió el día que el oficialismo convocó a una concentración en La Habana. Un ciudadano gritó consignas como «patria y vida» contra el dictador Miguel Díaz-Canel quien horas después se dedicó a decir mentiras durante su discurso. El hombre fue arrestado y no hay información sobre su paradero.
Los cubanos siguen buscando a amigos y familiares detenidos. Muchos están en «proceso de verificación», según el reporte de Cubalex. Oficialmente no hay cifras disponibles.
Fuente: PanamPost