CARACAS.- El régimen de Nicolás Maduro condenó «enérgicamente» la nueva ley aprobada el viernes por el Congreso estadounidense que prohíbe a las agencias federales norteamericanas hacer negocios con cualquier compañía que respalde a su dictadura.
«El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza contundentemente la aprobación por el Congreso estadounidense de una nefasta propuesta de ley que, tanto en su nombre como en su contenido, constituye una violación a las libertades económicas y una grave ofensa al pueblo venezolano», publicó el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano en un comunicado.
El Ministerio se refiere así a la Ley de Prohibición de Operaciones y Arrendamientos con el Régimen Autoritario Ilegítimo de Venezuela, Bolívar, por sus siglas en inglés, y que prevé sanciones para las empresas que mantengan tratos comerciales con Venezuela.
«Este instrumento, contrario al derecho internacional y concebido desde los sectores extremistas de la política en Estados Unidos, vulnera la integridad del pueblo soberano de Venezuela así como la de las mismas empresas estadounidenses, al colocarlas en riesgo de ser penalizadas, de manera arbitraria, injusta e ilegalmente, al ejercer su derecho al libre comercio mediante contrataciones con el Gobierno Bolivariano», argumentó Caracas.
Además, el régimen de Maduro considera que se trata de una norma «abusiva» que «demuestra, una vez más, el ensañamiento de sectores ultraconservadores y golpistas en la politica estadounidense» en su intento de «derrocar al Gobierno venezolano y de dinamitar cualquier ruta posible al diálogo y a las relaciones constructivas entre ambos países».
El nombre de la norma «ofende al pueblo venezolano, a su historia y a su Libertador, cuyos valores republicanos y compromiso con los principios de la libertad y de la paz están muy por encima de los de un puñado de legisladores ignorantes de su gloria, y que solo serán recordados por la historia debido a su complicidad con la agresión a países libres y soberanos».
«Frente a la amenaza monroista y a sus herederos constructores de la guerra, la República Bolivariana de Venezuela seguirá cultivando y defendiendo el legado del Libertador Simón Bolívar, labrando su propio camino de estabilidad politica y social, de recuperación económica y de diplomacia de paz, por un mundo libre de hegemonismo, colonialismo e imperialismo», concluye el texto.