Ortega tiene el control del poder legislativo, 71 diputados de la Asamblea Nacional, y 21 de otros partidos, en su mayoría aliados del dictador.
La dirección del CSE está ocupada actualmente por jueces afines al gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda) de Ortega, a quienes ya se les venció el plazo de cinco años para el que fueron nombrados.
El proceso de selección de nuevos candidatos durará 15 días, a partir de la publicación que se hará el martes de la resolución legislativa en la Gaceta diario oficial, informó el presidente del Parlamento, el oficialista Gustavo Porras, durante una sesión especial.
El legislativo, donde el partido de gobierno cuenta con un amplio apoyo de 70 diputados, aprobó crear una Comisión Especial de Carácter Constitucional de siete miembros, en su mayoría oficialistas, para «analizar» las candidaturas y estudiar «los aspectos electorales», sin precisar si se refería a una reforma electoral.
La oposición y diferentes sectores civiles nicaragüenses exigen desde hace años la aprobación de una reforma que garantice la realización de elecciones justas y transparentes, ante las denuncias de fraude formuladas por la oposición en los comicios municipales y nacionales (legislativos y presidenciales) celebrados desde 2008.
En 2017, una misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA) recomendó a Nicaragua promover una reforma electoral «que brinde mayor confianza y seguridad a las fuerzas políticas y a la ciudadanía».
En octubre del 2020, la OEA urgió nuevamente al régimen sandinista a reformar su cuestionado sistema electoral antes de mayo de este año, con el fin de asegurar unos comicios transparentes para noviembre.
Los partidarios de Ortega -quien gobernó durante la revolución sandinista en los años 80, retornó al poder en las elecciones del 2006 y «ganó» la reelección en los comicios del 2011 y 2016-, no descartan que el mandatario, de 75 años, se postule para un cuarto mandato sucesivo.
Fuente: Diario las Américas