Las remesas a México alcanzaron en julio un nuevo máximo histórico impulsadas por un mayor dinamismo de la actividad económica en Estados Unidos, el principal socio comercial y destino de los migrantes del país.
Los capitales recibidos durante el mes totalizaron 4,540 millones de dólares, un 28.6% más que en julio de 2020, con lo que suman 15 meses seguidos de crecimiento, después de que la incertidumbre provocada por el inicio de la pandemia mermó momentáneamente el flujo de transferencias.
El envío de remesas se ha convertido en un salvavidas para la golpeada economía mexicana, que se desplomó un 8.5% el año pasado, mientras que el presidente Andrés Manuel López Obrador se jacta de estos ingresos, que han crecido un 23.5% en lo que va del año a 28,187 millones de dólares, y agradece a sus coterráneos por enviarlas.
“Las remesas inician el tercer trimestre con el pie derecho a pesar de los retos que enfrenta el mercado laboral en Estados Unidos”, dijeron analistas de grupo financiero Monex, que destacaron la creciente incertidumbre sobre la primera economía del mundo debido a la nueva variante Delta del Covid-19.
Sólo en julio, número de transacciones se elevó un 13% interanual, a 11.6 millones; mientras que el monto promedio por operación creció a 391 dólares desde 343 en julio de 2020, informó el banco central.
Fuente: Forbes México